Ciudad de México | Desinformémonos. El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba) denunció el «ominoso silencio del gobierno mexicano» frente a las recientes agresiones por parte de un grupo de 40 invasores contra la comunidad autónoma zapatista de Nuevo San Gregorio, en Chiapas.
El Frayba señaló que desde finales de noviembre y hasta el 6 de diciembre de este año la Junta de Buen Gobierno “Nuevo Amanecer en Resistencia y Rebeldía por la Vida y la Humanidad”, del Caracol 10 Floreciendo la Semilla Rebelde, ha acusado la escalada de agresiones, hostigamientos y actos de vigilancia contra Nuevo San Gregorio.
El último ataque en la comunidad sucedió el pasado 6 de diciembre, cuando alrededor de 40 invasores entraron al territorio para trabajar las tierras en donde las Bases de Apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (BAEZLN) siembran y cultivan sus alimentos, además de pastorear el ganado.
Además de la invasión de los territorios, desde finales de 2019 la comunidad también ha sido víctima de detenciones arbitrarias de las autoridades autónomas, así como de cortes de árboles maderables y frutales en los terrenos recuperados en 1994. De acuerdo con el Centro, de las 155 hectáreas del territorio sólo diez están en manos de la comunidad, «minando el desarrollo de su autonomía política, alimentaria y el derecho a la propiedad territorial colectiva».
El Frayba urgió al Estado mexicano a que implemente «acciones tendientes para terminar con las violencias que muchas veces son sostenidas por autoridades comunitarias, municipales y estatales, bajo el respeto total de la tierra y el territorio que pertenece al EZLN en el marco de los Acuerdos de San Andrés, la Ley de Concordia y Pacificación, el Convenio 169 de la OIT, las Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas y de los Estados Americanos».
A continuación el comunicado completo:
Ominoso silencio del gobierno mexicano ante agresiones a Bases de Apoyo Zapatistas
La violencia hacia las comunidades autónomas zapatistas ha sido constante y ha escalado cuando una parte de la delegación “La Extemporánea” concluye su gira por la vida en Europa.
La Junta de Buen Gobierno “Nuevo Amanecer en Resistencia y Rebeldía por la Vida y la Humanidad” del Caracol No. 10 Floreciendo la Semilla Rebelde de la Zona Patria Nueva, ha denunciado nuevas agresiones, hostigamientos y actos de vigilancia que desde finales de noviembre al 6 de diciembre del presente año ha ejercido el grupo de los 40 en contra de la comunidad zapatista Nuevo San Gregorio, perteneciente al municipio autónomo de Lucio Cabañas, municipio oficial de Huixtán Chiapas.
El día de ayer el grupo de los 40 incursionó a la comunidad para trabajar las tierras en donde las Bases de Apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (BAEZLN) siembran y cultivan sus alimentos, además de pastorear el ganado. Han señalado que:
“Estos invasores se ponen a crear una zanja de 50 metros de largo para el pozo de agua fuente de ayuda y sostenimiento del colectivo de ganado de nuestros compañeros y compañeras zapatistas con el fin de provocar que se seque el abrevadero de sus animales… atentan con la vida de los animales que han sido el sostenimiento en la lucha de nuestras compañeras y compañeros durante años con resistencia y rebeldía. El pozo de agua también alimenta el colectivo de peces, un estanque de 2×3 metros, los dos colectivos ahora se encuentran en un alto riesgo de desfallecer. Cabe mencionar que los colectivos son grandes fuentes de apoyo y sostenimiento en nuestra lucha por la vida no para hacer algún daño, pero estos invasores nos siguen hostigando e invadiendo nuestros territorios”.
El despojo, hostigamiento, amenazas y vigilancia hacia la comunidad Nuevo San Gregorio comenzaron desde finales de 2019, hoy día los habitantes se han quedado sin la posibilidad de cosechar el maíz que habían sembrado. El grupo de los 40 han efectuado cortes de árboles maderables y frutales en los terrenos recuperados en 1994. De las 155 hectáreas sólo 10 están en manos de la comunidad minando el desarrollo de su autonomía política, alimentaria y el derecho a la propiedad territorial colectiva.
Esta serie de actos de violencia incluido la detención de ilegal y arbitraria de autoridades autónomas han sido denunciado por las Juntas de Buen Gobierno. Por lo que urgimos al Estado mexicano quien tiene conocimiento pleno de los hechos desde marzo de 2020, a que ponga en marcha acciones tendientes para terminar con las violencias que muchas veces son sostenidas por autoridades comunitarias, municipales y estatales, bajo el respeto total de la tierra y el territorio que pertenece al EZLN en el marco de los Acuerdos de San Andrés, la Ley de Concordia y Pacificación, el Convenio 169 de la OIT, las Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas y de los Estados Americanos.