Ni en los refugios encuentran refugio
Vivir en la bestia es aguantar el frío cuando se congela el techo, el calor cuando el sol lo convierte en una caldera ardiente, el hambre cuando te despojan del poco dinero que traes, dice un migrante hondureño. Además de la violencia del camino, ellos tienen que sobrevivir a los allanamientos oficiales de las autoridades migratorias mexicanas.
Jun 23 Cássio Dalbem Barth
Testimonio recogido por Jesús Muñoz en Lechería, Estado de México
Foto: Prometeo Lucero