Ciudad de México | Desinformémonos. El número de solicitantes de asilo en México aumentó un 600 por ciento en los últimos tres años, tiempo en el que el país se ha convertido no sólo en un país de tránsito, sino también de destino para las personas que huyen de la violencia, la persecución y la falta de oportunidades en sus países de origen, señaló el documento titulado “Agenda para la protección de personas refugiadas en México: 2019-2024” del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
El organismo indicó que la cantidad de solicitantes de asilo o refugio ascendió de 2 mil 137 en 2014 a 14 mil 596 en 2017, y que el aumento podría continuar en los próximos años.
Los refugiados provienen principalmente de los países centroamericanos como Honduras, El Salvador y Guatemala, pero también de Venezuela y Nicaragüa, agregó Acnur.
Indicó que si bien el número de solicitudes aumentó, el de refugiados es aún muy reducido en comparación con el total de la población, ya que sólo hay un solicitante por cada 9 mil mexicanos.
Por ello, Acnur indicó que es necesario “ajustar la política migratoria y de protección a refugiados en México, con el fin de respetar plenamente las obligaciones en materia de derechos humanos y protección internacional adquiridas por el país”.
Agregó que la Ley de Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político necesita ser revisada “para enfrentar esta realidad y estar plenamente en conformidad con los estándares internacionales y con la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951, de la cual México es Estado parte”.
Indicó que son necesarias algunas reformas legislativas para garantizar la protección de los refugiados, como fortalecer a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados y dotarla de autonomía orgánica y de gestión, aumentar sus recursos financieros y humanos, e incrementar su presencia geográfica a lo largo del país.
Además, llamó a las autoridades a “hacer más” para la protección de los solicitantes de asilo, incluyendo a niños y jóvenes que son obligados a abandonar sus hogares por las condiciones en sus países de origen.