Ciudad de México | Desinformémonos. La mañana de este miércoles ascendió a 31 personas el número de muertos por las explosiones del martes 20 de diciembre en el mercado de fuegos artificiales de Tultepec, el más famoso en México y que además presumía de ser el más seguro de América Latina.
De acuerdo con los registros de las autoridades del Estado de México, dos de las víctimas son menores de edad, entre las que se encuentra un bebé de tres meses. Únicamente cinco de las víctimas murieron en hospitales, mientras que las 26 restantes lo hicieron en el mercado de Tultepec.
El gobierno del Estado de México indicó a las 9 horas que “13 de los cadáveres han sido reconocidos por sus familiares (se han entregado los restos de 10 de ellos)”.
Las autoridades estatales comunicaron que “se tiene conocimiento de 12 personas no localizadas, de las cuales 5 son hombres (dos menores y 3 adultos) y 7 mujeres adultas, de los cuales se verifica si las características físicas corresponden a las personas que perdieron la vida o bien que están siendo atendidas en hospitales”.
“Están contabilizadas 60 personales lesionadas: 47 permanecen en hospitalización, 9 personas han sido dadas de alta, y cuatro personas fueron atendidas en el lugar”, agregaron.
Las autoridades consideraban al mercado de fuegos artificiales de San Pablito, en Tultepec, Estado de México, como el más seguro de toda América Latina. Tan sólo ocho días antes de las explosiones en el lugar, el gobierno celebró en un comunicado de prensa que el Instituto Mexiquense de la Pirotecnia calificara al recinto como el más seguro de la región.
El comunicado citó las palabras de Juan Ignacio Rodarte Cordero, director del centro, una entidad del gobierno estatal, que reflejaron que esa seguridad se debía a que San Pablito contaba con “puestos perfectamente diseñados y con los espacios suficientes para que no se dé una conflagración en cadena en caso de un chispazo”.
Además, Germán Galicia Cortes, presidente del mercado, aseguró que en lugar se contaba con extintores, agua, arena, pico, pala y personal calificado para actuar en caso de algún incidente, de acuerdo con el comunicado.
Sin embargo, este 20 de diciembre se desencadenaron una serie de explosiones que consumieron el mercado y lo dejaron calcinado después del medio día, cuanto cientos de personas compraban cohetes para las celebraciones de Navidad y Año Nuevo.
Esta es la tercera ocasión en que el mercado queda envuelto en llamas, con la primera en el 2005.
Crescencia Francisco García dijo que estaba en medio del mercado cuando empezaron las explosiones alrededor de las 2:30 de la tarde. Primero quedó pasmada, miró al cielo como acto reflejo y empezó a correr en medio del humo en cuanto se dio cuenta de que todo el mundo huía. Mientras corría, vio personas con quemaduras, cortaduras y mucha sangre.
“Todo se estaba prendiendo. Todo estaba explotando”, dijo la mujer de 41 años. “Las piedras salían volando, pedazos de tabique, todo estaba volando”.
La venta de cohetes y pirotecnia en Tultepec representa el sustento de muchas familias en el lugar desde hace dos siglos, con 65 por ciento de la población dedicada a la fabricación y comercialización de los fuegos artificiales.
El mercado de San Pablito abrió hace 16 años, y las previsiones de este año indicaban que se venderían 100 toneladas de productos a todo el país.
“Sabemos que es una actividad de alto riesgo, lo lamentamos mucho, pero mucha gente, desafortunadamente mucha gente, tiene su sustento en esta actividad”, expresó el alcalde de Tultepec, Armando Portuguez.
En 2005, el mismo mercado fue destruido por las explosiones en cadena que calcinaron cientos de locales comerciales, y un año después un incidente similar destruyó varios centros de venta de pirotecnia.
Mercado de San Pablito en Tultepec antes de la explosión
Mercado de San Pablito en Tultepec después de la explosión