México, DF. Organizaciones sindicales, magisteriales, sociales y campesinas se movilizaron contra la reforma energética, y decretaron el 2014 como el año de la resistencia contra la aplicación de las contra reformas estructurales, un año de marchas y protestas contra la imposición gubernamental.

En el mitin celebrado luego de la marcha que partió de la glorieta de la Palma hasta el Zócalo capitalino, el padre Miguel Concha señaló que la sociedad está reclamando su derecho colectivo a la soberanía del país, y afirmó que los gobernantes no se han dado cuenta que México «ya no es un país de súbditos, sino de ciudadanos libres».

Dirigentes de la Unión Nacional de Trabajadores, del Frente Sindical Mexicano, de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y de la nueva Central de Trabajadores se pronunciaron por la unión de luchas, por el cambio de modelo económico y un alto a la afectación de las reformas estructurales a las clases mayoritarias del país.

La vanguardia de los contingentes fue encabezada por representantes del sector obrero y la disidencia magisterial, sin la presencia del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, quien ingresó minutos antes a la Plaza de la Constitución con un grupo de simpatizantes.

El avance de la marcha se hizo por Paseo de la Reforma, mientras integrantes de diversas organizaciones sociales e intelectuales que conforman el Congreso Popular realizaron un mitin frente a la Bolsa Mexicana de Valores, donde realizaron una clausura simbólica.

El contingente de profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación se unió a la movilización a su cruce con Paseo de la Reforma e Insurgentes.

Entre los integrantes de la vanguardia de la protesta se ubicaron Martín Esparza, secretario general del SME; Juan José Ortega Madrigal, secretario general de la sección 18 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), así como representantes de diversas organizaciones sociales y de defensa de los derechos humanos.

Miguel Concha Malo, director del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, aseguró que esta movilización es una llamado a la unidad no sólo de las organizaciones sociales sino de todos los sectores de la población e incluso de aquellos actores políticos “que buscan la transformación del país y que deben superar sus diferencias para defender nuestra soberanía nacional, los recursos naturales para nuestro desarrollo, pero también los derechos humanos, en particular, los económicos, sociales y culturales”.

Afirmó que al conmemorarse un aniversario más de la expropiación petrolera “buscamos levantar la voz, unificarnos todos más allá de nuestras legítimas diferencias. Este es un primer paso, de muchos otros que espero vendrán”.

En tanto, Ortega Madrigal señaló que el magisterio disidente se suma a esta protesta no sólo por la defensa de la soberanía nacional, sino para exigir el respeto al patrimonio cultural y educativo de todos los mexicanos, que con la armonización de la reforma educativa “está claramente en riesgo”.