La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha lanzado un llamado para advertir la catástrofe humanitaria que se cierne sobre el Sudán del Sur, donde cuatro millones están amenzadas por la hambruna y unas 30 mil podrían morir de inanición en los próximos días.
«El hambre extrema está empujando al pueblo al borde de una catástrofe en partes de Sudan del Sur» aseguraron tres agencias de la ONU en un comunicado en el que indicaron que 3 millones 900 mil sursudaneses se enfrentan a una «inseguridad alimentaria severa».
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el fondo de la ONU para los niños (Unicef) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) han insistido en que «al menos 30.000 personas están viviendo en condiciones extremas y se enfrentan a la inanición y la muerte» en el Estado de Unidad (norte).
Las tres agencias demandaron al gobierno y a los rebeldes, que se enfrentan desde hace dos años, que garanticen «urgentemente y sin restricciones» el acceso a esta región sursudanesa para intentar paliar la situación.
Según el índice Clasificación Integrada de las Fases de Seguridad Alimentaria, que mide los distintos grados y riesgos de hambruna, parte de la población se encuentra en la fase más grave, la cinco, calificada de «catástrofe», informa la agencia Efe.
El Gobierno y los rebeldes sursudaneses alcanzaron en agosto un frágil acuerdo de paz, después de casi dos años de un conflicto que estalló en diciembre de 2013 tras las acusaciones del presidente Slava Kiir (de etnia «dinka») contra el vicepresidente Riek Machar (de la etnia rival «nuer») de haber orquestado un golpe de estado.
Información Efe