Ciudad de México | Desinformémonos. Por lo menos 30 defensores de derechos humanos fueron asesinados en México en los primeros meses del 2017, mientras que ocho han sido desaparecidos, señaló el último reporte la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos «Todos los Derechos para Todas y Todos».
El documento “La esperanza no se agota. Situación de las personas defensoras de derechos humanos durante la presidencia de Enrique Peña Nieto”, revela que este sexenio ha sido “letal” para los activistas y defensores, pues desde el 1 de diciembre de 2012 al 31 de julio de 2017 fueron asesinados o ejecutados extrajudicialmente 106 defensores, mientras que 81 han sido víctimas de desaparición forzada.
Por otra parte, en los primeros cuatro años de la administración de Peña Nieto se registraron 862 eventos contra colectivos y organizaciones defensoras y sus integrantes, y en ese mismo periodo de tiempo fueron asesinados 76 defensores, de los cuales 24 a manos de agentes estatales y 53 por otros sujetos.
El informe apunta que los gobiernos estatales son los que más vulneran y agreden a los defensores, con un total de 273 ataques, de los cuales el gobierno federal cometió 32 por ciento, mientras que los agentes municipales 20 por ciento y los funcionarios de procuración de justicia estatales y federales 18 por ciento.
«Las instituciones se exhiben con toda su crudeza: son dispositivos de control, diques de contención, artificios para masacrar, barreras y jaulas para proteger a quienes están en la zona desde donde se ejerce la dominación”, señaló la Red en su informe. “Ante la adversidad, y pese al contexto de riesgo, corrupción e impunidad, siguen aumentando las personas que día con día luchan por el reconocimiento, vigencia y promoción de nuestros derechos humanos», agregó.
De acuerdo con la Red, Chiapas, Oaxaca, Ciudad de México y Guerrero son los estados donde se registró el mayor número de casos de agresiones contra defensores. Además, los principales perpetradores no estatales son grupos de choque, empresas privadas y medios de comunicación.
Los tipos de agresión más comunes son las detenciones arbitrarias o ilegales, agresiones físicas, uso desproporcionado o indebido de la fuerza, intimidación, encarcelamiento arbitrario, hostigamiento, amenazas, violaciones al derecho de acceso a la justicia, desaparición forzada, violaciones al derecho a la protección frente al abuso del poder, amenazas de muerte, violaciones al derecho a la seguridad ciudadana, vigilancia, violaciones al derecho a la honra y la reputación, allanamiento y asesinatos.