Los hondureños Paola Quiñones Sánchez y Jorge Moncada Nájera, de 21 y 23 años, respectivamente, vivieron un verdadero infierno durante 10 días que permanecieron secuestrados en una casa de seguridad cerca de Reynosa, Tamaulipas.
Junto con 114 migrantes, ambos jóvenes fueron plagiados por grupos del crimen organizado el 11 de junio, y el lunes pasado, mediante dos operativos encabezados por la Procuraduría General de la República (PGR), fueron liberados.
Paola y Jorge participaron en la Caravana Peregrinación por el Diálogo, encabezada por el sacerdote y activista Alejandro Solalinde Guerra, que se reunió con autoridades federales y de los gobiernos de Centroamérica (CA) para exigir se atienda la problemática migrante.
Una vez terminados los trabajos de la Caravana en la Ciudad de México, algunos grupos de migrantes continuaron su camino hacia la frontera norte.
Fue entonces que Jorge y Paola decidieron tomar un autobús hacia la frontera con Texas, pero antes de llegar a Reynosa fue interceptado por un grupo armado.
De acuerdo con la versión de Lorena Nájera, madre de Jorge, éste le llamó el sábado 14 de junio a las cinco de la tarde para decirle que estaba secuestrado, junto con Paola.
Los delincuentes le exigían dos mil dólares (poco más de 26 mil pesos mexicanos) para liberar a cada uno. Para el miércoles 18, los secuestradores bajaron el monto a mil 500 dólares (19 mil 600 pesos) y luego a mil (13 mil pesos mexicanos), mismo que debía ser depositado en una tienda Elektra.
Según Alberto Donis Rodríguez, coordinador del albergue Hermanos en el Camino, organizaciones civiles realizaron la denuncia del secuestro masivo ante distintas instancias de gobierno y la PGR actúo rápidamente.
En el primer operativo, realizado la mañana del pasado lunes 23, fueron liberadas más de 30 personas. Por la tarde, alrededor de las 15:00 horas, en un segundo operativo fue localizado un grupo de más de 70 personas migrantes, entre ellas se encontraban Paola y Jorge.
De acuerdo con Donis Rodríguez, las víctimas rescatadas serían trasladadas la tarde de este martes a la Ciudad de México, donde rendirán su declaración en la PGR.
Según testimonios, Paola Quiñones presenta una infección e inflamación en el ojo derecho, así como problemas de hipertensión, mientras que Jorge está visiblemente demacrado.
Paola tuvo un papel importante durante el paso de la Caravana Peregrinación por el Diálogo en el DF, asumió la vocería de las mujeres y en el Senado de la República dijo:
Si nosotras las mujeres no alzamos la voz, nadie nos va a escuchar, y hoy yo hablo por esa mujer que ha sido violada, que ha sido secuestrada, que ha perdido un hijo; incluso no sé si han escuchado, hace poco la señora que su hijo perdió un miembro de su cuerpo.
¡Qué necesidad tenía esa criatura de perder un miembro de su cuerpo en ese tren! Sólo por la razón de ser migrantes, de no tener un papel para poder viajar en un autobús tranquilos, fustigó.
De acuerdo con la Ley de Migración reformada en 2011, las y los migrantes al ser víctimas o testigos de algún delito cometido en territorio nacional pueden solicitar una visa por razones humanitarias, lo que les permite permanecer en México hasta que concluya el proceso.
Un informe reciente publicado por la Oficina de América Latina en Washington (WOLA, por sus siglas en inglés) indica que durante el año pasado, 400 mil migrantes sin documentos de Centro América transitaron hacia EU por territorio mexicano.
Además la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) informó que en un periodo de seis meses, durante 2010, 11 mil personas migrantes fueron secuestradas.
Por su parte, la organización civil Movimiento Migrante Mesoamericano estima en 70 mil los migrantes desaparecidos hasta 2012.