Redacción Desinformémonos
Organizaciones de derechos humanos publicaron que por cada cinco personas LGBT (Lésbicas, Gays, Bisexuales y Transexuales) que son asesinadas en Centroamérica, al menos tres son de nacionalidad hondureña, cuyo país registró un total de 172 delitos contra esta comunidad en los últimos cinco años.
De estos casos el 92 por ciento quedaron impunes, y en el 45 por ciento estuvieron involucradas las autoridades policiales, las cuales son señaladas como un factor común en las violaciones de derechos a los LGBT, por las agresiones de tortura, amenazas y detenciones arbitrarias.
«Prevalece el desinterés y la falta de voluntad política para garantizar los derechos humanos” de este grupo, señala un informe publicado por el Comité de la Diversidad Sexual de Honduras, que establece que esto es en parte ocasionado por una «cultura machista y alimentada por el fundamentalismo religioso”.
La comunidad demanda además la invisibilidad ante las entidades, tales como el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), e incluso a la Unidad de Investigaciones de Alto Impacto, creada por el ministerio público para la investigación de los homicidios cometidos contra las personas LGBT.
En un conjunto de exigencias por parte de las víctimas, la penalización de la impunidad como delito de odio, la incriminación a la intolerancia y la xenofobia, y la facilidad legal para cambiar los datos personales con respecto a las personas transgénero, son puntos esenciales para que la comunidad pueda vivir de acuerdo a sus garantías como seres humanos.
Con información de Adital