Ciudad de México | Desinformémonos. Alrededor de 500 indígenas tsotsiles realizaron una peregrinación la mañana del jueves para hacer oración por que el conflicto entre las comunidades de Chenalhó y Chalchihuitán, en Chiapas, se resuelva y lleguen a la paz.

Los tsotsiles, guiados por un párroco de la iglesia de San Pedro Chenalhó, se concentraron en el crucero de Las Limas, donde hicieron votos por el cese a la violencia entre los pueblos y el fin del desplazamiento forzado de sus habitantes.

Señalaron que los indígenas deben recordar que “el enemigo es la pobreza y la marginación” de los pueblos olvidados, por lo que las comunidades necesitan volver a caminar juntos independientemente de la resolución del Tribunal Unitario Agrario para determinar los límites territoriales que originaron el conflicto desde hace más de 40 años.

“Queremos evitar otra masacre como la de hace 20 años en Acteal”, dijo el sacerdote Manuel Pérez Gómez, quien encabezó la peregrinación y la oración por la paz.

“Hemos peregrinado al crucero de Las Limas que comunica a dos municipios hermanos, pero que ahora es un signo de división, para pedir que haya paz y reconciliación entre hermanos divididos, para que este punto sea de comunicación y no de confrontación”, dijeron los indígenas.

Denunciaron que la actitud del gobierno no ha motivado la resolución del conflicto y que “si las autoridades federales, estatales y municipales no hacen bien su trabajo, será muy difícil y casi imposible que haya una verdadera solución”.

En la zona del conflicto, organizaciones de derechos humanos han documentado con base en los testimonios la presencia de sujetos con el rostro cubierto y armados que controlan el territorio, los cuales propiciaron el desplazamiento de casi 6 mil personas a los montes de los Altos de Chiapas.

El representante de la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), Jan Jarab, señaló que los desplazados han sido forzados a enfrentar “condiciones precarias e inhumanas, incluyendo la falta de condiciones adecuadas de salud, la ausencia de un lugar de refugio adecuado y poco o nulo acceso al agua o a la alimentación, además de encontrarse en una situación continua de inseguridad”.