El reconocimiento legal ha tenido un impacto nacional
Somos trabajadoras sexuales, no personas en situación de prostitución
Fotos: Luis Jorge Gallegos
Ciudad de México, 1 mayo. Como cada primero de mayo, trabajadoras sexuales de la Ciudad de México salieron a las calles del Centro a revindicar su clase como trabajadoras no asalariadas. Alrededor de las 11 de la mañana partió el contingente de aproximadamente mil 200 personas desde la calle de Corregidora con trabajadoras sexuales, integrantes de Brigada Callejera de apoyo a la Mujer, la organización popular Francisco Villa de Izquierda Independiente y cooperativas de salud y café.
Las demandas de este año son la derogación de la fracción VII, artículo 24 de la Ley de Cultura Cívica, el derecho a la jubilación, el reconocimiento como un trabajo más y que no se considere como un delito, derecho a vivienda y que no se les etiquete como personas en situación de prostitución, entre otras.
Acompañados de la comparsa Okupa del colectivo Chanti, recorrieron las calles Corregidora, Avenida Circunvalación, San Pablo, Izazaga y Veinte de Noviembre para terminar en un acto político a un costado de la plancha del Zócalo.
Teresa Malagón, de 65 años y con más de 35 como trabajadora sexual, declaró que desde que se convocó por primera vez a esta marcha en el 2006 ella ha participado. “Gracias a esto y a muchas cosas más logramos maravillosamente el amparo que nos reconoce como trabajadoras no asalariadas, […] gracias a estar en la lucha aprendí a tramitar documentos que no tenía, defender mi trabajo y el lugar donde laboro», dijo Malagón. Me gustaría que el gobierno nos dejara trabajar en paz, nuestra ciudad nos da trabajo a todos”, concluyó.
Al respecto, Benita Contreras, con más de 18 años en este oficio, señaló que le gusta aprender más y defenderse porque no le hacen mal a nadie. “Las que nos llaman personas en situación de calle son las verdaderas tratantes porque tienen personas explotadas en una oficina, si quieren rescatarme que lo hagan con toda mi familia, que me den un departamento y una pensión mensual si es que en verdad quieren ayudarnos”. “Mis hijos saben a qué me dedico, les tuve que contar porque a mi hija la estaban enganchando por internet y les conté mi historia, lloré de alegría al ver que no me rechazaron”, finalizó.
Elvira Madrid, presidenta de la Brigada Callejera de apoyo a la Mujer, comentó que la existencia de posesión de calles por parte de compañeras debe darles visibilidad porque es «muy significativa» y para que no se sientan solas. “Los cambios son muchos a través de la lucha, como ya no dejarse extorsionar ni agredir, han aprendido a denunciar, conocer sus derechos, defenderlos y hacerlos valer, ahora ya defienden su fuente de trabajo que es lo que les da de comer”, puntualizó.
Por parte de la organización popular Francisco Villa de Izquierda Independiente, Rosario, integrante de este movimiento desde 1985, compartió que tuvieron que organizarse para tener una oportunidad de una vivienda digna. “Estamos a favor de las trabajadora sexuales porque son mujeres desamparadas y siguen siendo mal vistas, no estoy de acuerdo con lo que sufren a diario en las calles y por el maltrato de la gente, por eso nos solidarizamos con su lucha”, señaló.
Juan, integrante del colectivo Tejiendo organización Revolucionaria, afirmó que el motivo de salir a marchar este día es para que la sociedad y las cosas cambien para tener igualdad entre los jóvenes de los barrios populares. “Mi compromiso es la lucha de todos y por los derechos de la mujer y combatir la violencia de género, que todos tengamos las mismas oportunidades de estudio para contrarrestar poco a poco el proceso de exclusión”, indicó.
Cristal, trabajadora sexual transgénero con más de 22 años en el talón, dijo que es su deber de cada año salir a marchar porque deben estar unidas como trabajadoras no asalariadas. “Le pregunto al gobierno qué pasó con los departamentos que nos prometieron”, cuestionó. “Me gusta venir a estas protestas porque aprendo y conozco la realidad de muchas, les digo a esas feministas que nos nombran personas en situación de prostitución que nos están discriminando con esos motes, nos hacen sentir como cualquier cosa, les exijo que no se metan con nosotras porque no nos metemos con ustedes ni les estamos pidiendo nada. Todos los días son de lucha, protesta por conservar nuestro digno trabajo», finalizó.
Por último, Rosa Icela Madrid, integrante de Brigada Callejera, refirió que haber ganado el juicio de amparo y obtener la sentencia a favor del reconocimiento del trabajo sexual como un trabajo no asalariado tuvo un impacto a nivel nacional. “Las compañeras trabajadoras sexuales de Coahuila hicieron lo mismo y ganaron el reconocimiento legal. Al mismo tiempo en Morelia, Michoacán, por acuerdo del cabildo de los regidores las compañeras están en proceso de ser reconocidas como no asalariadas” explicó.
