Un nuevo hito se escribe en la complicada historia del oleoducto Keystone XLque desde hace años el gobierno de los Estados Unidos intenta construir para transportar crudo desde y hacia Canadá. Esta vez un juzgado del estado de Montana decidió suspender la construcción del proyecto que había sido impuesto unilateralmente por la administración de Donald Trump.
Desde hace algunos años este proyecto de la compañía TransCanada ha mantenido enfrentados a los grupos ambientalistas y las federaciones nativas de Norteamérica con el Gobierno Federal de los Estados Unidos. Esto debido a que el oleoducto, durante su trayectoria, pondría en riesgo territorios ancestrales y fuentes de agua para las poblaciones originarias del hemisferio norte americano.
“La corte ordena a los Demandados Federales y a TransCanada no participar en cualquier actividad para promover la construcción u operación de Keystone e instalaciones asociadas hasta que el Departamento haya completado un suplemento de la SEIS 2014 (Declaración de Impacto Ambiental Suplementario) que cumpla con los requerimientos”, señala el fallo de la corte.
El argumento del juez Brian Morris sería que el Gobierno de los Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, usó un examen ambiental del 2014 para justificar el permiso presidencial para la reanudación de la construcción del oleoducto. Sin embargo, este permiso estaría violando la Ley Nacional de Política Ambiental (NEPA) y la Ley de Especies en Peligro.
Larga historia de un oleoducto
Este acontecimiento es solo un punto más en la controversial historia del oleoducto Keystone XL que se construye desde Alberta (Canadá) hasta Nebraska (Estados Unidos) con el objetivo de movilizar el petróleo canadiense. Este oleoducto formaría parte además de un amplio proyecto que implica la conexión con el petróleo extraído desde el Golfo de México.
Pese a que el gobierno de Barack Obama había detenido la construcción del oleoducto en 2016 en medio de grandes conflictos con los pueblos originarios, en marzo del 2017 el presidente Donald Trump autorizó autoritariamente la viabilidad del proyecto. Es esta decisión la que generó mayor controversia y que, por ahora, ha sido revocada por un juzgado de Montana.
Por el momento el futuro del oleoducto se mantiene bajo incertidumbre. El Gobierno de los Estados Unidos y la compañía TransCanada tienen un periodo limitado de tiempo para reparar los errores señalados por la corte. ¿Se construirá finalmente el polémico Keystone XL que tantos problemas ha generado con los pueblos originarios norteamericanos?
Publicado originalmente en Servindi
