Ciudad de México | Desinformémonos. Después de que el pasado viernes una mina de carbón en Múzquiz, Coahuila, se inundó y colapsó, esta mañana las brigadas de búsqueda rescataron un cuerpo de los siete trabajadores que quedaron atrapados.

Brigadas de búsqueda y rescate conformadas por trabajadores de la mina colapsada y de otras minas, así como por bomberos y elementos policíacos y militares llevaron a la superficie el cuerpo de Mauricio N., uno de los siete mineros que el pasado 4 de junio quedaron atrapados bajo toneladas de carbón en la mina Micaram debido a que sus paredes no resistieron la inundación ocasionada por las lluvias.

Según información de El País, trabajadores y organizaciones denunciaron el pasado octubre las condiciones precarias de esta mina con una carta al director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Barlett, sin recibir respuesta.

«El 26 de octubre estuvo Barlett en Pasta de Conchos, la mina que colapsó en 2006 y sepultó a 65 mineros. Un familiar le pidió que nos recibiera para hablar de estas minas y ni siquiera nos contestó, nunca nos recibieron. No les importó», denunció la defensora de derechos humanos Cristina Auerbach en entrevista con El País. «El trabajador que me denunció sobre esa mina está atrapado ahora mismo. No es un accidente, no tenían las condiciones para trabajar, ni equipo de seguridad ni medios. No es la culpa de los trabajadores sino de los empresarios a los que no se les exige estas medidas», agregó.

Las primeras tareas de rescate del pasado viernes consistieron en localizar a los siete trabajadores atrapados y bombear el agua que tenía inundada la mina, ubicada en un predio llamado Rancherías, propiedad del productor de carbón Gerardo Nájera. Hasta el momento, las brigadas de búsqueda y rescate continúan.

Con información de El País y La Jornada