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Pobladores de Atlapulco exigen a alcaldía de Xochimilco deje de violentar su autonomía sobre el panteón

Redacción Desinformémonos

Ha pasado más de una semana desde que pobladores originarios de San Gregorio Atlapulco, en la alcaldía de Xochimilco, comenzaron a organizar guardias de día y noche para resguardar su panteón comunitario ante la amenaza de despojo por parte de un grupo de personas, entre ellas operadores políticos de la alcaldía a cargo del morenista José Carlos Acosta. A pesar de que el cansancio y el aumento de contagios causados por la quinta ola de COVID-19 han impactado en la coordinación para estas guardias, el pueblo mantiene la exigencia al gobierno de la alcaldía y el de la Ciudad de México de respetar a sus autoridades tradicionales y la autonomía de su panteón.

Las tensiones en el panteón de San Gregorio Atlapulco comenzaron este año con la publicación de la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, el 11 de marzo, del «Reglamento de Cementerios, Crematorios y Servicios Funerarios”, con el cual en diversos artículos violentaban la autonomía de los panteones comunitarios. Un ejemplo de ello es el artículo 127 que versaba:

“En los cementerios civiles y comunitarios la temporalidad mínima confiere el derecho de uso sobre una fosa durante siete años refrendable por dos períodos iguales, que será la temporalidad máxima; al término de los cuales volverá al dominio pleno de la Ciudad de México, a través de las Alcaldías. Tratándose de criptas familiares y nichos se aplicará el sistema de temporalidad refrendable, los refrendos a los que refiere el presente artículo se harán por cada gaveta ocupada”.

Después de movilizaciones de barrios y pueblos originarios, así como el acompañamiento de la Coordinación de Pueblos, Barrios Originarios y Colonias de Xochimilco, el 14 de abril presentaron un pliego petitorio al consejero jurídico de la Ciudad de México, Néstor Vargas, y concluyeron que agregarían algunos cambios, entre ellos, que el reglamento de cementerios no aplicaría a panteones comunitarios. Para el 22 de abril se volvió a publicar la normativa con estos cambios.

Mientras ocurrían estas exigencias, el comité propanteón de San Gregorio Atlapulco llamó a asamblea el 11 de abril. En ésta se dio a conocer que dos de las integrantes del comité, la secretaria y la tesorera, debían dejar sus cargos debido a que se les había descubierto en actividades y reuniones con la alcaldía. Estas dos personas por su parte, tomaron acciones al respecto, en primer lugar acudieron a la alcaldía para busca apoyo. Posteriormente, decidieron ingresar una demanda contra la decisión de la asamblea ante el Tribunal Electoral de la Ciudad de México (TECM). El 30 de junio el tribunal desechó la demanda interpuesta.

La asamblea del pueblo es la máxima autoridad”

Para elegir al comité del panteón, se realiza una asamblea que no tiene propiamente una normativa o una forma particular de funcionamiento, sin embargo, tienen criterios básicos de participación. Por ejemplo, deben ser originarios del pueblo y las decisiones siempre son a mano alzada. Una de las originarias de San Gregorio comentó que no tienen un reglamento o normas internas, pero en la penúltima asamblea, el pueblo comenzó a molestarse por el involucramiento de la alcaldía Xochimilco en los asuntos del pueblo.

“En la penúltima asamblea, el pueblo se pronunció por no admitir a gente que estuviera trabajando en la alcaldía o que fuera funcionario de la alcaldía. Hubo una gran discusión porque en ese momento gente de la alcaldía iba con la intención de tomar cargos de autoridades tradicionales, eso sí es un hecho. La gente no quiere una vinculación así”, mencionó.

Desde hace no más de 10 años, personas adultas mayores dejaron de llevar la administración del panteón. Actualmente se han elegido a mujeres jóvenes, como es el caso de la actual presidenta del comité, Patricia González, quien a sus cuarenta y tantos años ha buscado mejorar las condiciones del panteón. No sólo dándole seguimiento a la administración, la limpieza, reforestación y vigilancia, sino que ha puesto énfasis a la lucha por la autonomía del pueblo sobre su territorio.

Patricia fue elegida como presidenta del comité propanteón, a través de usos y costumbres, en noviembre de 2021 junto con un equipo constituido por una secretaria, una tesorera y tres vocales. Ella asegura que la mayoría de las veces, quienes son parte de las asambleas son las personas originarias y los titulares o custodios, quienes le dan mantenimiento a sus fosas y hacen los trámites de los restos cuando se entierra a un difunto.

Por el momento tienen como pendiente redactar el reglamento del panteón, sin embargo, aseguró que aunque no tienen una normativa escrita, sí cuentan con criterios de funcionamiento que se sustentan bajo sus usos y costumbres. “Una asamblea es la máxima autoridad del pueblo en donde puede uno decidir y tomar decisiones con toda la autonomía de acuerdo a nuestros criterios. Sí contamos con los criterios de cuando fuimos elegidas como autoridades tradicionales: tener principios y valores; ser originario del pueblo; no tener antecedentes en partidos o bien ser trabajadora de la alcaldía. Y también, que no hayas estado en otro comité anterior, puesto que eso evita que se vaya amañando la gente y que haya más oportunidad de participación. Otro criterio es que no duren tanto”, agregó.

Los problemas del panteón se resuelven en el panteón”

El domingo 10 de julio del 2022, las integrantes del comité propanteón llevaron acabo una asamblea extraordinaria dentro del mismo para dar a conocer la sentencia TECDMX-JLDC-53/2022. Sin embargo, ese mismo día, un grupo de personas, entre ellas la extesorera y exsecretaria, en compañía de personal de la alcaldía de Xochimilco, de la Secretaría de Pueblos y Barrios Originarios y Comunidades Indígenas Residentes (Sepi), así como del Distrito 25 del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), llamaron a una “asamblea informativa de rendición de cuentas” en la plaza cívica del pueblo, la cual se encuentra a un lado del mercado que en domingo es muy concurrido.

Durante la reunión, uno de los operadores políticos, quien también es habitante de San Gregorio, promovió un nuevo “patronato del panteón” bajo el mando de Ernesto Negrete, quien en las elecciones pasadas fue candidato independiente del Distrito 25. La decisión se tomó de manera arbitraria, pues no se contó con escrutador y no se contaron los votos de manera adecuada. Al concluir esta reunión, decidieron acudir al panteón para romper los candados de las puertas, amedrentar a quienes estuvieran adentro, apropiarse del panteón y posteriormente imponer este nuevo comité.

Mientras que las tensiones crecían en las afueras del panteón de San Gregorio ante la presencia de la policía, la alcaldía, en un acto violatorio a los derechos colectivos del pueblo, publicó en su página oficial de Facebook, así como en su cuenta de Twitter, que aunque “no tienen interés en estos procesos”, reconoce que ese mismo día, el de 10 de julio “de manera pública y con la presencia de autoridades del Instituto Electoral de la Ciudad de México” se había elegido un “nuevo patronato”.

Lo anterior fue interpretado por las autoridades tradicionales del panteón y por el pueblo de San Gregorio, como una irrupción de la alcaldía, pues no sólo había impuesto a un nuevo comité por encima de sus intereses y necesidades, sino que el IECM estaba negando el comité propanteón que habían elegido en noviembre del 2022 a través de su asamblea, por tanto, estaban desconociendo también la máxima autoridad del pueblo.

María Julieta, una de las adultas mayores que ha estado presente en las guardias del panteón calificó el acto de la alcaldía como un abuso de poder, “estas personas en ningún momento, cuando ellas anduvieron anunciando que se iba a hacer una asamblea, dijeron que era para un cambio de comité, sino que era para dar cuentas. Supuestamente la tesorera iba a hacer una rendición de cuentas, cosa que fue una mentira y llevaron a mucha gente, a muchos viejitos engañados a la plazuela para que firmaran a base de mentiras y tuvieran supuestamente el apoyo para elegir a un nuevo comité o patronato. Eso realmente fue una violación porque el comité ya estaba formado”, expresó molesta.

Otro vecino dijo que desde hace mucho están defendiendo el panteón y que quienes organizaron la reunión de la plaza cívica son “gente sin escrúpulos”, “sabemos que desgraciadamente la alcaldía se está apoyando en gente que por tradición tienden a ser traidores al pueblo y que está dispuesta a vender lo que tengan con tal de ganar a nivel individual y olvidarse del beneficio comunal”.

Por su parte, el abogado Alejandro Velazquez Zúñiga comentó que uno de los conflictos es que la alcaldía muchas veces quiere coptar a los representantes de los panteones para que los apoyen en las elecciones. “Es problemático que el Estado se involucre porque genera más conflicto. No habría ningún conflicto si la alcaldía no se metiera. Son conflictos intracomunitarios, son conflictos intravecinales que inciden en las relaciones sociales e incluso personales y familiares en los pueblos. Las alcaldías hacen que las familias entren en conflicto y eso rompe el tejido comunitario”. aseguró.

La lucha por la autonomía y libre determinación de los barrios y pueblos originarios de Xochimilco ha implicado diferentes momentos de pugnas ante el gobierno de la alcaldía y el aparato institucional del gobierno de la Ciudad de México. Los panteones comunitarios no sólo han sido focos de conflicto territorial, sino que son espacios donde persisten la memoria, la cultura y identidad.

Los motivos detrás de estas guardias son diversos, aunque encuentran un punto en común: la lucha por la autonomía y la libre determinación, como lo asegura una de las mujeres que vigila el panteón: “lo que me motiva a estar aquí es que se respeten las decisiones del pueblo. Yo quiero que este comité actual tenga un validez, que ya la tiene oficialmente por nosotros. El otro que se acaba de formar fue un atropello a nuestros derechos y decisiones”.

Por su parte, el señor Alejandro y la señora Ana María agregaron que el panteón es memoria y herencia de los ancestros que descansan en ese campo santo. “Yo estoy aquí por la defensa del panteón, que éste siga siendo comunitario. El territorio le pertenece al pueblo, defenderlo es no perder las tradiciones porque perder el panteón a manos de la alcaldía y volverlo como él quiere, se pierden muchas tradiciones principalmente del Día de muertos”, concluyó don Alejandro.

El pueblo de San Gregorio, junto con el abogado Velazquez Zúñiga presentaron un recurso para desconocer la asamblea que organizó la alcaldía Xochimilco a través de sus operadores políticos. Esta no es la primera vez que lo hacen: “Las comunidades se pueden defender por la vía social, como lo hicieron: llamaron, tocaron las campanas, la gente se organizó y de inmediato identificó a los operadores de la alcaldía y los corrió del lugar. También pueden utilizar las vías legales, nosotros vamos a ingresar un juicio para anular la asamblea ilegal que convocó la alcaldía Xochimilco el domingo”, dijo.

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