Miles de personas, entre alcaldes de Val di Susa y activistas históricos del movimiento No Tav, como Alberto Perino y Nicoletta Dosio, marcharon en procesión desde Bussoleno a San Didiero para protestar contra el nuevo autopuerto A32, que se levantará al margen de las obras del Turín-Lyon.
En la movilización también participaron jóvenes de otras áreas de Italia. Entre estos últimos hubo algunos representantes del comité No Grandi Navi da Venezia, junto con otros colectivos del noreste cercanos a los centros sociales de Padua, y del Comité Stop Biocide de Nápoles. Durante los discursos fue recordada la portavoz del Movimiento, Dana Lauriola, quien se encuentra bajo arresto domiciliario por una sentencia firme de dos años.
“Es absurdo que en medio de una crisis trascendental -acusa el movimiento No Tav- con el colapso de la sanidad, queramos abrir una obra más (la de San Didero) para drenar los fondos públicos de cara a los 0 km construidos hasta la fecha de la línea Tav Turín – Lyon. Es hora de hacer que se escuche nuevamente nuestra voz, la de un pueblo opuesto a la destrucción de todo un Valle, su ecosistema, la naturaleza y nuestras escasas finanzas. Es importante traer de vuelta las necesidades reales de la población y los territorios: salud, educación, renta, cuidado de las tierras e infraestructuras existentes”.
La marcha terminó con la «paliza» contra las redes de obra en San Didiero.
Publicado originalmente en il Fatto Quotidiano
