Hace una semana se realizó una nueva jornada en memoria de Luciano Arruga, cuando se cumplen 7 años de su desaparición.

Medios alternativos argentinos, elaboraron un video con el que  recuerdan no sólo a Luciano, sino la criminalización generalizada de los jóvenes pobres en Argentina.

A 7 años de la desaparición de Luciano y de cara a un nuevo 30 de enero “donde nos encontramos en la Plaza Luciano Arruga del barrio 12 de Octubre, seguimos exigiendo justicia para Luciano y todos los pibes víctimas de la policía”.

Luciano Nahuel Arruga salió de su casa en el barrio 12 de Octubre la noche del  31 de enero de 2009. Con unos centavos en la bolsa para ir a un cyber cercano, el adolescente de 16 años nunca volvió.

Durante casi 6 años, su familia buscó todas las vías formales para saber que había ocurrido con el joven, seguros casi de que habría sido víctima de la violencia institucional por parte de la policía bonaerense.

La noche de su desaparición, dos testigos aseguraron ver a un chico de campera blanca que era golpeado y metido a la fuerza a un vehículo de la policía, lo vieron golpeado y ensangrentado. Diversos peritajes certificaron que Luciano había estado en la comisaría 8ª de Lomas de Mirador. Al año de su desaparición, el destacamento fue cerrado y dos años más tarde se convirtió en el espacio para la memoria social y cultural de Luciano Arruga.

Un proceso judicial viciado de origen, porque la investigación empezó mal: la denuncia recayó en la fiscal Nº 7 de La Matanza, Roxana Castelli, quien le otorgó la investigación a la misma policía. Castelli fue acusada de entorpecer la pesquisa durante 35 días. La fiscal fue recusada y reemplazada Cecilia Cejas, quien con un rastreo realizado con perros, halló pruebas de que Luciano había estado en un auto abandonado en el patio trasero del destacamento y en una patrulla.

En julio de 2009, se determinó que los libros de detenidos que llevaba la dependencia estaban adulterados. Había nombres tachados y borrados de la noche de la desaparición de Luciano y otras anteriores. Sin embargo, el Ministerio de Seguridad provincial no sancionó a ningún policía.

El caso ha sido presentado en Argentina como un ejemplo emblemático de desaparición forzada durante la democracia por organizaciones de Derechos Humanos y el Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, que en su informe del 2010 exigió  «concluir una investigación exhaustiva e imparcial» e incluirlo en «conformidad con la Convención sobre los Derechos de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas”.

Pasaron cinco años y ocho meses hasta que se encontró el cuerpo del joven, enterrado en el cementerio de la Chacarita como N.N. Según documentos oficiales, murió en la madrugada del 1 de febrero, en un accidente de tránsito.

Que parezca un accidente.

video: EnMovimientoTv

con información de:  Perfil.com