Foto: Cardenal Donald Wuerl, acusado de encubrir los abusos (Susan Walsh / AP)

Ciudad de México | Desinformémonos. Los funcionarios de la Iglesia católica en Pensilvania y el Vaticano realizaron un “encubrimiento sistemático” de los abusos sexuales contra más de mil niños durante décadas, reveló una investigación judicial en Estados Unidos en la que se reunió evidencia creíble para culpar a más de 300 curas.

“Algunos fueron forzados a masturbar a sus atacantes o fueron manoseados por ellos. Otros fueron violados”, pero siempre los jerarcas eclesiásticos “prefirieron proteger a los abusadores y a su institución por encima de todo”, destacó el informe.

Los investigadores, por medio de la recopilación de testimonios y el análisis de más de medio millón de documentos de casi todas las diócesis de Pensilvania durante 18 meses, provocaron la inculpación de dos sacerdotes, aunque gran parte de los abusos sucedió hace tanto tiempo que los delitos han prescrito y muchos de los curas responsables ya murieron.

“A raíz del encubrimiento, casi cada instancia de abuso que hallamos es demasiado antigua como para presentar cargos”, lamentaron los investigadores. Sin embargo, Josh Shapiro, fiscal general de Pensilvania, indicó que “para muchas víctimas este informe del gran jurado hace justicia”.

“La mayoría de las víctimas eran niños, pero también hubo niñas. Algunos eran adolescentes, muchos eran prepúberes. Algunos fueron manipulados con alcohol o pornografía”, destacó el informe, en el cual se asegura que se registraron los abusos en todas las diócesis de Pensilvania, excepto dos.

Entre los casos documentados por los investigadores, se encuentra el de una niña de siete años que fue violada por un cura en un hospital luego de haber sido operada de las amígdalas y el de un menor que tomó un vaso de jugo y al día siguiente despertó con el ano sangrando.

“Estamos enfermos por todos los crímenes que no serán castigados ni compensados. Este informe es nuestro único recurso. Tanto a los depredadores sexuales como a aquellos que los encubrieron, vamos a llamarlos por sus nombres y describiremos lo que hicieron”, dijeron los investigadores.

Ante la publicación del informe, el gran jurado propuso reformar la ley para alargar el plazo de prescripción de los delitos de abuso sexual contra menores, así como dar más tiempo a las víctimas para presentar demandas civiles y endurecer la legislación que obliga a reportar los abusos.

De acuerdo con la organización no gubernamental Bishop Accountability, entre 5 mil 700 y 10 mil sacerdotes de la Iglesia católica han sido denunciados por abuso sexual, pero sólo algunos han sido condenados por sus crímenes, mientras que la institución ha gastado más de 3 mil millones de dólares en acuerdos con las víctimas.