Aviones de combate del ejército francés bombardearon por segundo día consecutivo la ciudad siria de Raqqa, capital del Estado Islámico, en venganza por los ataques terroristas del viernes que dejaron 129 muertos en París y más de 350 heridos.
El segundo bombardeo ocurrió la madrugada de este día. Los aviones despegaron de bases en Jordania y el Golfo Pérsico, en coordinación con fuerzas estadounidenses.
El Estado Mayor de los Ejércitos de Francia anunció, en un comunicado, que los bombardeos (10 jets de combate arrojaron 20 bombas) destruyeron un campo de entrenamiento de yijadistas y un polvorín en la ciudad, donde de acuerdo con la inteligencia iraquí fueron planeados los ataques a París.
