Mujeres filipinas que fueron obligadas a prostituirse por japoneses durante la segunda guerra mundial, exigieron hoy justicia y una disculpa pública por parte de Japón durante una protesta en la capital.
Las manifestantes, ya de edad avanzada, se congregaron en las afueras del Palacio Presidencial de Filipinas, donde se encontraba de visita el emperador japonés Akihito y su esposa.
«Nuestras abuelas nunca recibieron una disculpa oficial ni compensación del gobierno japonés», aseguró Lila Pilipina, representante de las mujeres sometidas a abusos por militares de Japón.
Durante la oupación japonesa en Filipinas, de 1941 a 1945, miembros del ejército secuestraron a alrededor de mil mujeres, indicó Pilipina, quienes fueron violadas, maltratadas y forzadas a la prostitución.
Otras diez naciones del sudeste asiático también fueron víctimas de los abusos militares de Japón durante la segunda guerra mundial, donde se calcula que unas 200 mil mujeres sufrieron de los mismos abusos, de las cuales el 75 por ciento murió en el conflicto y la mayoría de las supervivientes quedaron estériles.
Con información de Prensa Latina
