Fotos: Elihú Cortés

Este 2024 se cumplen 50 años de la desaparición del líder social Rosendo Radilla y 10 de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. En ese medio siglo, “los actores del Estado son los mismos y el continuum es la impunidad y el pacto de silencio, así como una política de contrainsurgencia y aniquilación de disidencias políticas (estudiantes, obreros, activistas, líderes campesinos, periodistas…)», afirmó Abel Barrera, comisionado del Mecanismo para la Verdad y el Esclarecimiento Histórico (MEH), durante la presentación del Informe Final del mismo este 31 de octubre, en la Universidad Iberoamericana Ciudad de México.

El informe documenta en sus seis volúmenes –editados por Publicaciones IBERO y obsequiados a las y los asistentes– las violaciones a los derechos humanos desde 1965 hasta 1990 y sustenta que “el estado mexicano es el último responsable” de las mismas, enfocándose en crear una nueva narrativa sobre este periodo de violencia estatal.

“Existe una deuda histórica con la verdad y la justicia transicional”, de acuerdo con el Vicerrector Académico de la IBERO, Dr. Alejandro Anaya Muñoz, quien señaló que el Informe es “un regalo de la Verdad” para las víctimas, sus familiares y la sociedad en su conjunto. Su presentación en la IBERO reafirma el compromiso de la universidad y de la Compañía de Jesús con la justicia, en palabras del Mtro. Joseba Buj, Director de la División de Humanidades y Comunicación, quien fungió como moderador durante el evento.

“En México pasamos del autoritarismo al baño de sangre”: Fernández Dávalos

El Mtro. David Fernández Dávalos, S.J., también comisionado del MEH y ex Rector de la IBERO Ciudad de México, subrayó el hallazgo de que muchos de los perpetradores de la Guerra Sucia estaban activos y actuando todavía en la represión que acontece en el país y que muchos de los métodos de ese periodo, como la “desaparición, vuelos de la muerte, tortura, ejecuciones” continuaban presentes tanto en el crimen organizado como en las fuerzas de seguridad del Estado. Es por ello que, apuntó, el informe lleva a reflexionar sobre el presente a partir del pasado.

En las últimas décadas, “en México pasamos del autoritarismo al baño de sangre”, sin procesos de castigo a los responsables de las violaciones estatales a los derechos humanos, ni depuración de las fuerzas del Estado, ni creación de nuevas instituciones; tampoco hubo mecanismos de justicia transicional. Entonces tenemos “las mismas instituciones, el mismo Ejército, la misma Fiscalía que se creó para castigar a los disidentes y para su uso político, y por eso no podemos resolver el presente”, afirmó el jesuita.

Desde su formación en 2021, el MEH generó muchas expectativas y desde entonces ha atravesado un sinfín de obstáculos para cumplir con su mandato. El padre Fernández Dávalos informó que el equipo del MEH visitó seis zonas militares; logró ubicar algunos centros de reclusión clandestina, algunos centros de tortura; consultó el archivo del Ejército, “hasta que fue insostenible por las agresiones, los impedimentos y obstáculos que lo hicieron intolerable”. Y narró cómo el gobierno pasado, en un inicio colaboró, pero “igual que con Ayotzinapa, de repente dejó de colaborar y ocultó información. Somos testigos de que mutilaron archivos, de que ocultaron cosas que nosotros pudimos ver y que después ya no estaban; cajas que tenían 200 fojas y al rato ya nada más tenían 20”.

8,594 víctimas de violaciones graves a DH y 517 víctimas de desaparición forzada

El Dr. Al-Dabi Olvera Castillo, académico del Departamento de Letras de la IBERO, participó junto con estudiantado de tres generaciones de la Licenciatura en Literatura Latinoamericana en la conformación del Informe. El cronista de movimientos sociales y ambientales detalló la composición de los seis volúmenes presentados y detalló que se identificaron 8,594 víctimas de violaciones graves a derechos humanos, 517 víctimas de desaparición forzada, 591 perpetradores y se realizaron 142 recomendaciones a 22 autoridades.

En la presentación también participaron dos activistas sociales: Emma Jessica Duvali, activista trans sobreviviente de los sistemas represores de los años 60, 70 y 80, y el normalista Jorge Velázquez, de Amilcingo, Morelos.

“Mi lucha social está sobre la sangre de mis hermanas que asesinaron”, dijo la luchadora social en pro de las disidencias sexuales Emma Yessica, cofundadora del archivo Memoria Trans México, quien dio testimonio del “sistema represor” que atentó contra los derechos humanos de las personas LGBTIQ+, y en particular de las trans. “Si no hay cambios estructurales reales de nada van a servir los informes; vamos a seguir siendo botines políticos”, señaló.

El normalista morelense Jorge Velázquez dio un panorama de la represión estatal en Amilcingo desde los años 70 del siglo XX, cuando dirigentes y autoridades de la comunidad, como el luchador social Vinh Flores Laureano, fueron asesinados; hasta 2019, cuando fue ultimado su sobrino, el activista Samir Flores, a raíz de su oposición a la termoeléctrica del Proyecto Integral Morelos.

Las conclusiones de la presentación fueron dadas por la investigadora titular del Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia, Hélène Combes. La Dra. en Ciencia Política por la Universidad de la Sorbona destacó que el Informe del MEH, a diferencia de otras comisiones de la verdad en otras latitudes, documenta a detalle poblaciones diversas de víctimas de regímenes autoritarios que no estaban contempladas, con nombres y relatos precisos; además de que demuestra la recurrencia de las masacres a lo largo de todo el territorio mexicano. “México está en un momento clave de su debate democrático” y el Informe contribuye a “romper el silencio”.

Publicado originalmente en la IBERO