Para las organizaciones de Centroamérica que pertenecen a la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo CLOC-Vía Campesina, 2023 fue un año de importantes luchas, de logros de la población indígena y campesina y de resistencia contra las acciones de los grupos reaccionarios.
En Guatemala, las organizaciones indígenas y campesinas jugaron un papel determinante en la resistencia contra las fuerzas golpistas que pretendían impedir el ascenso de Bernardo Arévalo al Gobierno. Las luchas de calles en demanda del respecto a la institucionalidad y en contra del golpe que se fraguaba tuvieron muchos protagonistas, pero principalmente a líderes campesinos e indígenas. Aunque la resistencia no logró el propósito de provocar la renunciar de la Fiscal golpista, sí pudo impedir el Golpe de Estado. Arévalo asumirá la presidencia el 14 de enero.
En Panamá hubo importantes luchas contra el proyecto minero de la empresa canadiense First Quantum Minerals en las que muchas organizaciones, entre ellas campesinas e indígenas. Las movilizaciones y cortes de ruta obligaron a la Corte Suprema de Panamá a anular el contrato que la empresa quería ampliar para explotar la mina de cobre a cielo abierto ubicada en el ecosistema del bosque de Donoso, que provocaría el agotamiento de las reservas de agua y la expulsión de pequeños campesinos y campesinas de la región. Con esta victoria popular se crearon las condiciones para seguir reclamando la derogación de todas las concesiones en esa área.
En El Salvador se realizaron muchas manifestaciones de protestas contra el alto costo de la vida, los desalojos de tierras, las políticas antiagrarias y de fomento de las importaciones, las violaciones al marco legal por parte del régimen, la persecución política, los apresamientos ilegales de miles de personas en el marco del régimen de excepción, entre otras banderas. En esas luchas las organizaciones campesinas e indígenas tuvieron un rol muy importante. Aunque el régimen sigue aplicando sus políticas, ha habido victorias en la lucha por la defensa de la tierra y crearon nuevos espacios de lucha popular que seguirán dando importantes batallas.
En Costa Rica, muchas organizaciones le presentaron al Gobierno un plan nacional de agricultura familiar. Aunque el plan no está aprobado, se han realizado importantes acciones de incidencia y articulaciones municipales. También se ampliaron las acciones y las articulaciones de organizaciones que luchan por la defensa de la tierra y los derechos de pueblos originarios y comunidades campesinas.
En Honduras, donde el Gobierno progresista que dirige Xiomara Castro tiene el respaldo de muchos sectores populares, incluyendo a las organizaciones campesinas e indígenas, ha habido importantes logros para el campesinado. Con la entrega de Bonos Tecnológicos Productivos se produjeron 15 millones de quintales de granos básicos (maíz, frijol, arroz y sorgo), se creó una reserva de frijol y maíz y se estabilizaron los precios de los alimentos. También se ha apoyado la ganadería y casi 1 millón de productores se han beneficiado de los Bonos Presidenciales. Además, se aprobó la Política de Estado del Sector Agroalimentario para aumentar la producción de alimentos y desarrollar el medio rural, con programas de diversificación, comercialización equitativa, gestión de riesgo, protección ambiental y financiamiento de la banca nacional.
En Nicaragua, el sector agropecuario ha tenido muchos logros en los 16 años de Gobierno Sandinista, que ha implementado extensivas políticas agropecuarias, y estrategias socioproductivas, incluyendo muchos programas de apoyo al sector campesino. La producción se duplicó, genera el 16.5% del PIB nacional y el 35% de las exportaciones y contribuye con la seguridad y soberanía alimentaria, la generación de empleo, el desarrollo rural y la dinamización de la agroindustria, el comercio, el transporte y la banca. El agro es un pilar fundamental del desarrollo nacional. Las organizaciones indígenas y campesinas han contribuido a esos logros, con sus propuestas y su apoyo a la política del Buen Gobierno.
Desde la CLOC-Vía Campesina Región Centroamérica, reafirmamos nuestro compromiso de seguir luchando por la defensa de la tierra y a favor de políticas que garanticen el derecho al agua, la protección del medio ambiente, la seguridad y soberanía alimentaria y el desarrollo rural. Y seguiremos rechazando las políticas neoliberales que promueven la privatización de empresas públicas, el despojo de la tierra, la concentración de la riqueza y el aumento de la pobreza y la emigración.
Publicado originalmente en CLOC-Vía Campesina