Una autopista podría atravesar el Gran Bosque de Agua, en los límites del poniente del Distrito Federal con el Estado de México. Éste bosque, uno de los últimos proveedores de agua y aire puro en la zona conurbada, sería cortado por la autopista Toluca- Naucalpan, concesionada a la constructora Teya (filial de Grupo Higa), promovida como una autopista “verde”.
El 9 de julio, la Presidencia de la República publicó un decreto de expropiación en el Diario Oficial de la Federación para abrir paso, legalmente, a las obras de construcción de la autopista.