Foto: Cuartoscuro
Ciudad de México | Desinformémonos. Organizaciones defensoras de los migrantes denunciaron el recrudecimiento de la violencia perpetrada por agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) en Chihuahua, contra las personas en contexto de movilidad humana y los periodistas que documentan las agresiones, especialmente desde la reactivación de los operativos migratorios el pasado 1 de abril en Ciudad Juárez.
En un comunicado, más de 40 organizaciones resumieron las “decenas de agresiones” a migrantes por parte de los agentes del INM, que “incluso se han apoyado de perros y otras tecnologías como drones” en sus operativos, de acuerdo a los testimonios.
Señalaron que el caso más reciente se difundió el pasado 10 de abril, cuando el Diario de Chihuahua compartió un video en el que se observa a decenas de personas, entre ellas menores de edad, “huyendo de agentes de migración” en la estación Villa Ahumeda.
El 9 de abril, decenas de migrantes fueron abandonados por los elementos del INM en una gasolinería en la carretera federal, cerca de la estación de la Guardia Nacional en Delicias. Entre los migrantes se encontraban 25 infantes y adolescentes y 55 adultos, entre ellos mujeres embarazadas y personas con condición médica vulnerable. Las personas fueron posteriormente albergadas por la asociación Uno de Siete Migrando, donde recibieron atención médica, jurídica y psicológica, explicaron las organizaciones.
Finalmente, el 8 de abril se documentó cómo cinco elementos del INM “sometieron de forma violenta” y le arrancaron la camisa a un migrante en la capital de Chihuahua, además de que violentaron al periodista que los grabó e “impidieron el trabajo periodístico para documentar el hecho”.
“Estas acciones abusivas y violentas no contemplan la protección y el respeto a los derechos humanos de las personas, quienes manifiestan la violencia ejercida contra ellas, además del robo de sus pertenencias, desde dinero en efectivo, teléfonos, hasta sus documentos personales”, acusaron las organizaciones defensoras.
Añadieron que el que la violencia por parte del INM continúe a un año del incendio en la estación migratoria de Ciudad Juárez demuestra que la institución “no tiene como prioridad la protección de las personas, sino la contención migratoria de manera violenta”, frente a lo que exigieron el alto urgente a la persecución contra los migrantes; transparencia y comunicación sobre las condiciones en las que se encuentran las personas en movilidad detenidas y procesadas una vez que son interceptadas por el estado; seguimiento de las comisiones de derechos humanos para garantizar la seguridad y protección de los migrantes, y respeto a la labor periodística y a las personas que la ejercen.
