Johannesburgo. La actividad se reanudó este viernes en la mina sudafricana de platino de Marikana (norte), escenario de una huelga sangrienta en agosto y perturbada el jueves por un nuevo paro convocado en respuesta a la detención de al menos cuatro mineros. «Todos los empleados de Lonmin que habían detenido su trabajo el jueves 18 de octubre lo han retomado», indicó en un comunicado la empresa explotadora británica Lonmin. El jueves, los mineros iniciaron por sorpresa una huelga tras el arresto en una semana de cuatro colegas sospechosos de asesinato. Los investigadores siguen buscando a los autores de unos ajustes de cuentas cometidos durante la huelga de agosto, en la que murieron 11 personas. Los mineros, en cambio, acusan a la policía de estar hostigándolos. La policía dijo el viernes que está actuando contra «criminales que deben responder de sus actos ante la justicia», y aseguró que se basa en «pruebas sólidas». La policía negó, además, estar obstruyendo el trabajo de la comisión de investigación encargada de esclarecer los actos violentos cometidos durante la huelga, principalmente la masacre de 34 huelguistas abatidos por agentes el 16 de agosto.