Defensores de derechos humanos se reunirán el próximo mes en un encuentro internacional para exigir que se esclarezca el caso de la lideresa ambiental e indígena Berta Cáceres, quien fue asesinada la madrugada 3 de marzo en su casa en La Esperanza, Honduras.

Berta Cáceres, coordinadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH), por su dedicación a la protección y defensa de los derechos de los pueblos indígenas y del medio ambiente, reiteradamente recibió amenazas y fue víctima de persecución y hostigamiento, agresiones que fueron ignoradas cuando las denunció.

Laura, la hija menor de Cáceres, hizo un llamado para que la solidaridad, indignación y la inconformidad se demuestren a través de los movimientos sociales, especialmente en el marco de una movilización indígena en los próximos días y el encuentro internacional a mediados de abril.

Por otra parte, Leticia Flores, representantes de la Ayuda de las Iglesias Protestantes de Suiza en Honduras, HEKS-EPER, aseguró que las manifestaciones internacionales resonarán con fuerza en los países, pues incluso naciones europeas han demostrado interés en participar en las movilizaciones para denunciar el asesinato de la líder.

Más de 27 organizaciones no gubernamentales, agrupadas en la Asociación de Cooperación Internacional (Espacio ACI), se pronunciaron públicamente contra el feminicidio de Cáceres, agregó Flores.

Incluso quienes forman parte de la organización que entrega el premio Goldman, el cual Cáceres ganó en el año 2015, y otros acreedores de dicho reconocimiento se han manifestado desde diferentes países del mundo.

Las hijas de Berta Cáceres – Olivia, Berta y Laura- exigieron en una conferencia de prensa que la comunidad internacional esté al pendiente de las investigaciones, además de que se facilite un comisión integrada por expertos extranjeros y personas de su confianza.

«Demandamos en el marco del cumplimiento de las medidas de protección, la firma inmediata de un convenio de asistencia técnica entre el Estado de Honduras y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)», y el apoyo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para investigar el crimen, porque consideran que las autoridades pretenden encubrir a los culpables, concluyeron.