En las calles se vive como un nuevo triunfo la suspensión de la APEC y COP25. Ayer, la movilización demostró que sigue en alza y miles de manifestantes salieron a las calles a pesar de la represión. Hoy se espera una nueva jornada con el llamado a la huelga general. Por ANRed
El levantamiento en Chile no ha cesado a pesar de los esfuerzo del gobierno por mostrar una «normalización» del país. A los tenues anuncios de aumentar las pensiones, los aportes jubilados y ajustes a la burocracia política le sucedió una renovación en la planta de ministros, con la notoria salida del ministerio del Interior Andrés Chadwick.
Ninguna de las medidas que el gobierno implementó para bajar las protestas a logrado un cambio en la clima social. Esto quedó demostrado ayer en la multitudinaria concentración que se dio en Santiago y en todo el país que se suceden. Hoy, el presidente Piñera suspendió la realización de la APEC, el foro económico que buscar realizar el tratado de libre comercio más grande del mundo en la región Asia-Pacifico pactada para el 16 y 17 de noviembre. El anuncio también incluyó la cancelación de la COP25 una cumbre climática que iba a realizarse a mediados de diciembre. Los movilización identificaba estás cumbres empresariales y de Estados como una continuación de las políticas que viene aplicando el gobierno.
“Nuestro gobierno y con profundo dolor, porque este es un dolor para Chile, ha resuelto no realizar la cumbre de Apec y tampoco la cumbre de la COP. Sentimos y lamentamos profundamente los problemas e inconvenientes que los problemas de esta decisión significará para ambas cumbres”, explico Sebastián Piñera en conferencia de prensa y argumentó el motivo de la suspensión “dadas las difíciles circunstancias que ha vivido nuestro país, y que hemos vivido todos los chilenos durante las últimas semanas, y considerando que nuestra primera preocupación y prioridad como gobierno es concentrarse absolutamente en, primero, restablecer plenamente el orden público, la seguridad ciudadana y la paz social; segundo, impulsar con toda la fuerza y la urgencia que se requiere la nueva agenda social para responder a las principales demandas de nuestros ciudadanos; y tercero, impulsar un amplio y profundo proceso de diálogo para escuchar a nuestros compatriotas”.
Por su parte, el Instituto Nacional de Derechos Humanos de Chile, INDH, denunció que un observador de dicha institución recibió siete disparos de balines y tuvo que ser trasladado de urgencia.
Publicado originalmente en ANRed
