Cientos de pescadores continúan con el bloqueo de las vías de acceso a la isla de Chiloé, en Chile, como protesta para exigir una mejora en el bono de 100 mil pesos chilenos que el gobierno entregará a los afectados por la marea roja en la zona.

Las manifestaciones iniciaron hace cuatro días luego de que la presidenta, Michelle Bachelet, decretara estado de catástrofe a todo el borde costero de la región de Los Lagos, como consecuencia de la contaminación que no permite a los pescadores artesanales extraer productos del mar.

La integrante del sindicato de pescadores de la localidad de Quemchi, Julia Chiguay, afirmó que el monto de asistencia es “escaso” y que no se conformarán con lo propuesto por las autoridades, sin importar que unos 200 miembros de las Fuerzas Especiales de Carabineros arriben a la isla en la próximas horas para restablecer la conectividad con el continente.

«Nos vamos a mantener acá hasta que haya una solución y si tenemos que morir, vamos a morir acá», aseguró.

Se trata de una comunidad que prácticamente no vive sin los beneficios de la pesca, la cual tiene una prohibición en estos momentos ante el riesgo de que la proliferación de las algas contamine a los mariscos.

El desabastecimiento comienza a golpear duramente a la isla con escasez de combustible y algunos alimentos.

La región de Los Lagos actualmente cuenta con más de 31 mil pescadores artesanales, que hoy se ven afectados por la marea roja provocada por microalgas.

Con información de agencias