Ciudad de México, 19 de febrero de 2015. Nueve años han pasado desde que la mina de carbón de San Juan de Sabinas, conocida como Pasta de Conchos, en Coahuila, explotó y desde entonces los 63 cuerpos de los mineros siguen atrapados en los socavones de la mina, ubicada en la región Nueva Rosita.
La empresa Industrial Minera México y las autoridades mexicanas se niegan a rescatarlos, hoy en San Lázaro el presidente de la Cámara de Diputados, Tomás Torres Mercado, manifestó su solidaridad con las familias de los mineros sin embargo se negó a dar un minuto de silencio en memoria de las víctimas.
El Sindicato Nacional de Mineros realizó una marcha silenciosa por el centro de la capital federal, para demandar justicia en el caso de sus compañeros y que se mejoren las condiciones laborales y de seguridad en las minas de carbón del país.
En el año 2006 durante el gobierno de Vicente Fox la mina ocho en Coahuila explotó, el entonces presidente negó el rescate de los cuerpos arguyendo que el lugar presentaba fallas de seguridad en el socavón, propiedad de Grupo México, lo cual hacía imposible el rescate de los mineros.
La organización Familia Pasta de Conchos continúa su exigencia para el rescate de los cuerpos de sus familiares y demandan mejores condiciones laborales y de seguridad de los demás trabajadores mineros que hoy por hoy siguen muriendo o quedando mutilados.
Han pasado ya 108 meses desde que los mineros quedaron atrapados a cientos de metros bajo tierra, y hoy los familiares de los mineros siguen exigiendo al gobierno mexicano que saque los cuerpos de sus familiares, ya tres sexenios lo han prometido y ninguno ha cumplido.
