Foto: @Spiaboc
Ciudad de México | Desinformémonos. “Aquí nada más se vienen a tomar la foto y luego se van”, gritó una mujer al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, durante la demolición del centro escolar más emblemático de la comunidad de Juchitán, a la que también se presentó la presidenta municipal, Gloria Sánchez López, y el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño, como parte de las acciones tras el sismo de 8.4 grados Richter.
Otra mujer que presenciaba la demolición exigió a Murat que recorra la séptima sección para ver las casas afectadas por el sismo, en la que familias completas “están durmiendo en la calle y expuestos a saqueos”.
Por otra parte, los habitantes de la comunidad cuestionaron a Sánchez López sobre la ayuda humanitaria, la cual aseguraron que es nula. Además, se preguntaron dónde están los 65 millones de pesos otorgados por la empresa Eólica del Sur y lanzaron: “Presidenta, haga uso de los 65 millones para los damnificados”.
Murat, por su parte, respondió ante las quejas:
“Paisanos, les pido un minuto de su tiempo y de silencio para que nos escuchen, este es un momento importante para la comunidad de Juchitán. Ahorita vamos a platicar. Lo que viene es muy importante para nuestros hijos”.
Los funcionarios señalaron que el centro escolar de Juchitán, el cual cumplió 79 años de antigüedad, será reconstruido por el ejército mexicano en un plazo no mayor a cinco meses. “Sabemos que esta escuela se encuentra no sólo en el corazón de la comunidad, sino en el corazón de todas las personas de Juchitán y que es parte del orgullo del Istmo”, dijo Nuño.
Antes de que iniciara la demolición, los asistentes, entre los que se encontraban maestros y estudiantes, cantaron el Himno Nacional Mexicano.
