Ciudad de México | Desinformémonos. Los derrames de lixiviados “altamente contaminantes” por el basurero intermunicipal de San Pedro Cholula, Puebla, alcanzaron los campos de cultivo y mantos freáticos de los alrededores, demostró en un video la Unión de Pueblos y Fraccionamientos contra el Relleno Sanitario y en Defensa del Agua.
Los pueblos de la región, que desde el pasado 21 de marzo se mantienen en plantón frente al basurero para evitar su operación, acusaron que el derrame de lixiviados es “una contaminación ambiental generada por la empresa Profaj Hidro limpieza, representada por el senador por Morena, Cuauhtémoc Ochoa, y su apoderado local Pablo León”.
En el video se muestra los campos de cultivo de maíz rodeados por los escurrimientos de desechos tóxicos, que se han agravado por las lluvias en la región cholulteca, sin ninguna intervención oficial para proteger la tierra.
Desde el pasado 23 de septiembre, la Unión de Pueblos y Fraccionamientos denunció que la contaminación en la zona continúa a pesar de que el basurero fue clausurado de manera definitiva el pasado 21 de agosto por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), y pese haber sido clausurado por decreto de los pueblos el pasado 14 de mayo.
“El basurero continúa contaminando con los lixiviados que emanan de la montaña de muerte generada por la empresa criminal Profaj Hidro Limpieza en complicidad con el gobierno estatal y municipal”, señalaron los pueblos en septiembre.
Desde que se instaló el plantón en marzo, los pueblos en resistencia han sido objeto de represión policial, hostigamiento, amenazas e intimidación. El último caso sucedió el pasado 23 de septiembre, cuando dos tanquetas del ejército y patrullas de la Guardia Nacional rondaron los alrededores del plantón, sólo dos días después de que policías y trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) intentaran “la imposición de reconexión de energía eléctrica para las instalaciones del basurero de muerte”.
Desde el intento de reconexión de la energía eléctrica el pasado 21 de septiembre, los pueblos responsabilizaron al gobernador de Puebla Sergio Salomón Céspedes y al secretario de Gobernación Javier Aquino Limón “de cualquier atentado” en contra de quienes defienden la vida y el territorio, y reafirmaron su compromiso en la lucha por la tierra y el agua de la región cholulteca.