Decenas de minusválidos que iniciaron una protesta por el aumento de un subsidio fueron reprimidos con gases lacrimógenos por la policía en Bolivia, mientras intentaban ingresar a la Plaza de Armas donde se encuentra el Palacio de Gobierno.
Algunos de los manifestantes, con sus sillas de ruedas o muletas y portando banderas bolivianas, trataron de romper un cordón policial que les impedía el paso a la Plaza.
La policía boliviana utilizó agentes químicos en espray que provocaron que varios de los inconformes se desvanecieran.
«Estamos aquí para dialogar, queremos dialogar con el presidente (Evo Morales), queremos que nos escuche el presidente», afirmó en uno de esos accesos el dirigente de los discapacitados, David Cayo, quien reiteró el pedido de aumentar un subsidio mensual de 80 bolivianos (11.5 dólares) a 500 bolivianos (72 dólares) por persona.
Según el poder Ejecutivo, el aumento del subsidio supondría subir el presupuesto anual para el sector de 22 millones de bolivianos (3.2 millones de dólares) a 368 millones de bolivianos (52.9 millones de dólares).
Cayo, dirigente de los manifestantes, reiteró que ninguno de ellos se retirará de la sede gubernamental hasta que sus demandas sean atendidas.
Con información de agencias
