El resumen de los trabajos de la Misión Internacional “Justicia para Berta Cáceres Flores” destaca la debilidad manifiesta en Honduras del estado de derecho ante la ausencia del respeto de los derechos democráticos y los derechos humanos, así como la impunidad y opacidad sobre el asesinato de la líder indígena lenca, Berta Cáceres, quien era coordinadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH).

Las conclusiones de la Misión Internacional, que desplegó una investigación entre el 17 y 21 de marzo en Honduras, apuntan que en el país no existe la voluntad política necesaria para acabar con la impunidad imperante en relación a los hechos que lo transformaron en el más peligroso para los defensores del ambiente, la tierra, el territorio y los derechos humanos.

Además, resaltó las sistemáticas y flagrantes transgresiones al derecho regional e internacional de derechos humanos, incluyendo las violaciones de los derechos de los pueblos indígenas, a través del desarrollo de proyectos hidroeléctricos, mineros, forestales y agroindustriales incluyendo el proyecto Agua Zarca.

Entre las 25 recomendaciones que la Misión Internacional formuló, se encuentra el cancelar de manera inmediata el proyecto Agua Zarca y todas las concesiones otorgadas en territorio lenca sin el debido consentimiento previo, libre e informado de las comunidades afectadas por su construcción.

De igual forma, llamó a los pueblos, movimientos y organizaciones populares del mundo a redoblar sus acciones para demostrar la solidaridad con los integrantes del COPINH, frente a las agresiones y amenazas que han sufrido desde antes del asesinato de Cáceres, así como con su familia, el activista mexicano que permaneció retenido en Honduras, Gustavo Castro, y todos los defensores hondureños en su lucha contra la violencia y el abuso.

Por último ratificó su compromiso con la resistencia del COPINH, con esa “lucha que no cesa sino que se intensifica ante la cada vez más clara intención de impunidad del Estado hondureño y sus aliadas corporaciones multinacionales, acompañada del incremento en la hostilidad y persecución a nuestro movimiento y a todo el que se atreve a resistir desde esta expropiada y ensangrentada tierra hondureña, dentro de una evidente estrategia de desarticulación y destrucción del COPINH y de todo el movimiento social”, concluye el informe.

Aquí el informe completo: Misión Internacional «Justicia para Berta Cáceres Flores»