Acapulco, Gro. La dirigente de policías comunitarias de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), Aurora Molina González, no pudo salir de prisión la tarde de este martes como estaba programado, pues autoridades le fincaron más delitos.

Un juez dictó auto de formal libertad a Aurora Molina, acusada de terrorismo, privación de la libertad y robo, porque no había pruebas incriminatorias.

Sin embargo, alrededor de las 18 horas, se conoció la noticia de que un secretario de acuerdos de Tixtla, entregó otra causa penal contra Autora Molina, por los delitos de robo específico, que es un delito grave; y el delito de lesiones en agravio del ayuntamiento por el robo de armas y de una persona que se llama Jesús Guadalupe Levideño Domínguez, en hechos ocurridos el 26 de agosto de 2013.

El representante jurídico de Aurora Molina, Mariano Ramírez, señaló que el traslado de su representada a la cárcel de Acapulco es una de diversas irregularidades.

Criticó que “no nos permitieron ver el auto de formal libertad para imprimirlo y firmarlo”.

Agregó que “esperamos desde las 13 horas que nos entregaran información de Aurora Molina, nos la negaron, pero con el paso de las horas indagamos y nos enteramos que el secretario de acuerdos de Tixtla”.

Manifestó que “es obvia la confabulación entre las autoridades, tanto la procuraduría, el poder judicial y la penitenciaría para impedir la salida de Aurora”.

El abogado sostuvo que “se evidencia que hay consigna desde el momento en que de manera ilegal la trasladan sin que en el expediente justifique cuál es la razón urgente para hacerlo”.

Recriminó que autoridades penitenciarias hicieron tiempo para esperar al secretario de acuerdos de Tixtla y no permitir la libertad de Aurora Molina, detenida la semana anterior en Tixtla.