Ayer miércoles 14 de enero inició la caravana civil, que tiene como objetivo encontrar con vida a los estudiantes normalistas de Ayotzinapa desaparecidos la noche del 26 de septiembre, el comité partió de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos y llegó en las horas de la tarde al Centro Regional de Estudios Normalistas en Iguala, Guerrero.
Por consenso de los padres de los normalistas desaparecidos, los ocho puntos que planean buscar fueron determinados por testimonios anónimos que por razones de seguridad aún se desconocen. La exigencia de los padres de familia de que se abran los cuarteles para buscar ahí a sus hijos, en parte se debe a dos peticiones al gobierno mexicano, una de ellas es que se abra una línea de investigación que permita indagar la responsabilidad del Ejército Mexicano en los hechos ocurridos la noche de septiembre en iguala.
Existen elementos probatorios, según informa el abogado Vidulfo Rosales Sierra del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, que elementos del ejército tuvieron conocimiento de la operación del cartel de Guerreros Unidos en Iguala y su relación con el gobierno municipal, además ese día los soldados estuvieron presentes en el lugar del ataque a los estudiantes y para el abogado, son argumentos suficientes para que se les abra investigue.
Así mismo ya se han presentado testimonios ante el Ministerio Público (MP), y en la Procuraduría General de la República (PGR), de los estudiantes que también fueron retenidos el 26 de septiembre por elementos del ejército, al igual que el testimonio de un policía de apellido Bárcenas que corroboró la presencia de personal del 27 Batallón de Infantería de Iguala, con el grupo Guerrero Unidos y el hoy detenido presidente municipal, José Luís Abarca.
El comité de búsqueda va resguardado por 80 elementos de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC), de la casa matriz de San Luis Acatlán, El Paraíso, Ayutla de los Libres y Olinalá, así como por integrantes de la Coordinadora Regional de Seguridad y Justicia Ciudadana y Popular de Temalacatzingo, y del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Parota del poblado Cacahuatepec, municipio de Acapulco.
En Oaxaca Y Morelos, diversas organizaciones sociales y civiles se sumaron a la búsqueda de los estudiantes en los cuarteles militares, en ambos lugares les permitieron la entrada y como se lo esperaban, no encontraron nada, sin embargo señalan que la búsqueda en estos lugares es simbólica, solo exigen que el ejército y el Estado reconozcan su participación y que después de 111 días de no saber donde están los jóvenes estudiantes, por fin la justicia haga realmente su trabajo, que hasta hoy ha sido insuficiente.
Con información de La Jornada
