Ciudad de México, 6 de febrero 2015.   Comunidades opositoras al Proyecto Integral Morelos (PIM), denunciaron que el gobierno de Rafael Moreno Valle, las amenazó con el fin de obligarlos a que la Comisión Federal de Electricidad instale el gasoducto Morelos.

Además de las amenazas constantes a los opositores que llevaron al encarcelamiento de dos de sus integrantes más visibles, Juan Carlos Solís y Enedina Rosas, el gobierno de esta entidad amenazó con despojarlos de sus tierras con ayuda del Ejército, denunciaron organizaciones sociales y defensoras de derechos humanos durante una rueda de prensa.

El proyecto que tiene contemplado construir dos termoeléctricas, un gasoducto de 160 kilómetros que atravesaría 60 pueblos en tres estados en una zona de riesgo por el volcán Popocatépetl, además de un acueducto que pasará por 19 pueblos en Morelos, es federal y ha sido el argumento usado por el gobierno durante tres años para no suspender la obra.

Las organizaciones denunciaron que en Puebla ha sido más aguda la represión porque muchos de los pueblos no aceptan el proyecto y esto ha llevado a que el gobierno de Moreno Valle, envié hasta cuatro citatorios por semana a los campesinos que no han querido vender sus tierras para darle vía libre a los conductos para la construcción del gasoducto.

El ambiente en las tierras que no han querido vender es tenso, trabajadores de la empresa constantemente están cerca de sus casas sacando fotografías, los defensores ya tienen documentados dos casos ante la Comisión de Derechos Humanos.

El gobierno de la entidad le dice a la gente que están obligados a asistir a reuniones que el único objetivo que tiene es tratar de convencerlos para que vendan sus tierras y así practicar su ya común estrategia de dividir a los pueblos, denuncian en la rueda de prensa.

Los abogados que acompañan a los pueblos en su lucha contra el proyecto, puntualizaron en que es una obra totalmente ilegal, pues aún no tienen claros los trazos, porque los modifican cada vez que alguien no quiso vender, además de no respetar el amparo que prohibía continuar con la construcción del gasoducto.