La fiscalía de Honduras intervino a la empresa a la que se oponía la ambientalista y líder indígena, Berta Cáceres, por desarrollar el complejo hidroeléctrico Agua Zarca, al noreste del país, que desplazaría a cientos de familias indígenas del río Gualcarque.

En el registro de la empresa local Desarrollos Energéticos (DESA) se decomisaron documentos y armas, aunque la policía aún no da aún ninguna hipótesis oficial para desenmascarar a los responsables del asesinato de Cáceres, el pasado 3 de marzo.

«El pasado 13 de marzo se intervino por orden judicial la empresa (DESA). De haber indicios suficientes se complementarán con la prueba científica para posteriormente presentar las acciones correspondientes», señaló la fiscalía mediante un comunicado.

Por otra parte, el ministerio público, cuya investigación sobre el homicidio de Cáceres ha sido objeto de duras críticas por parte de organizaciones nacionales e internacionales que exigen la verdad y justicia sobre el caso, anunció que el activista mexicano, Gustavo Castro, podía abandonar Honduras.

Con información de agencias