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Los cancilleres de los países integrantes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) arribaron este jueves a Paraguay para defender el proceso democrático en ese país, donde su presidente Fernando Lugo enfrenta un juicio político.

El corresponsal de TeleSur en Paraguay, Guillermo Verón, informó que las personas manifestaron su indignación por la maniobra de la oposición en Paraguay en contra de Lugo.

Dijo que el respaldo popular crece a medida que pasan las horas. A través de las imágenes de TeleSur, se pudo evidenciar que muchas personas han salido a las calles con banderas de Paraguay para protestar.

Este jueves la cámara de diputados de Paraguay solicitó un juicio político contra Lugo, usando como argumento los enfrentamientos ocurridos el pasado viernes en la población de Curuguaty, donde murieron 11 campesinos y seis policías, hechos confusos que están siendo investigados por orden presidencial.

En este contexto, Lugo manifestó que no renunciará a su cargo y que se mantendrá al frente del país para «evitar que una vez más en la historia de la República, un hecho político le robe el privilegio y la soberanía a la suprema decisión del pueblo expresada con su voto».

Lugo subrayó que se someterá «con absoluta obediencia a la constitución y las leyes para enfrentar el juicio político con todas sus consecuencias».

La tentativa de golpe de Estado en Paraguay por parte de la derecha también condujo al pronunciamiento de rechazo por parte de los países que conforman la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) y la decisión de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) de enviar una comisión de cancilleres a la nación paraguaya para buscar una salida a la situación que se presenta en el mencionado país.

La política antirrepresiva y la reivindicación de la lucha por la redistribución de la tierra son dos de las causas presentadas por la derecha paraguaya para justificar el intento de Golpe de Estado en contra el presidente Fernando Lugo.

La apertura al diálogo y la disposición a reconocer las demandas campesinas, en vez de utilizar a los cuerpos policiales para agredir, fueron utilizados por los parlamentarios como argumentos para exigir la destitución del primer mandatario mediante un juicio político.

Para los legisladores, las acciones de los carperos, como son conocidos los luchadores por la tierra, no son más que «abusos, agresiones y atracos a la propiedad privada» y reclamaron «la falta de respuesta de las fuerzas policiales ante las invasiones».

«El presidente Lugo se mostraba siempre con puertas abiertas a los líderes invasores», como fueron descritos los campesinos y defensores de una reformas que favorezca a los desposeídos y no a los latifundistas.

Para los parlamentarios, los carperos debían ser «combatidos» por tratarse de «extremistas» que «desafían y amenazan abiertamente a los ciudadanos honestos».

Se tiene previsto que la defensa del líder paraguayo se exponga este viernes a las 12:00 del mediodía (hora local). Posteriormente, a las 2:30 de la tarde se presentarán las pruebas, una hora más tarde se expondrán los alegatos y a las 4:30 de la tarde se emitirá la sentencia.

Desconociendo el mandato popular que respalda la gestión del mandatario, los senadores aseguraron que Lugo «ha incurrido en mal desempeño de sus funciones en razón de haber ejercido el cargo que ostenta de una manera impropia, negligente e irresponsable».

La acusación ha sido presentada en la sede del Poder Legislativo sin contarse con prueba alguna que la sustente y los denunciantes se han limitado a esgrimir que las causas «son de pública notoriedad, motivo por el cual no necesitan ser probadas».