Ciudad de México. En los últimos meses, las detenciones arbitrarias parecen un método de represión que se vuelven cada vez más frecuentes y con mayor grado de violencia en el Distrito Federal, señaló en un comunicado el Comité por la Defensa de Ernesto Aguilar Martínez, quien el pasado 3 de agosto fue detenido en la estación del Metro Mixcoac. Una mujer de la Policía Auxiliar lo acusa de agresión sexual, ocurrida en medio de un altercado por la detención de un amigo de éste, por parte de la policía del Metro.

Ernesto Aguilar, estudiante de doctorado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) e integrante de la Red Feminista de Defensoras de Derechos de las Mujeres (Red No Están Solas), la noche del domingo documentó la detención de su amigo Claudio González Sánchez, quien era agredido por policías dentro de la estación del Sistema de Transporte Colectivo Metro de la Ciudad de México.

La madrugada del martes fue trasladado al Reclusorio Preventivo Norte, donde lo culpan de delito sexual, acusación que no tiene derecho a fianza. El comité creado en defensa del estudiante de la UNAM, denuncia que el proceso en el que se encuentra sujeto, está plagado de irregularidades y violaciones a sus derechos humanos. “No hubo respeto al derecho del debido proceso de Ernesto, fue consignado casi a las 24 horas de ser detenido, cuando la ley establece que el tiempo es de 48 horas. Otra de las irregularidades es que el Ministerio Público no aceptó más testigos”, manifiesta Mariana Mendívil, novia del estudiante, en una entrevista al diario El Universal.

Amigos y organizaciones sociales convocan a denunciar los abusos de poder, la violación a los derechos humanos ejercidas contra Ernesto Aguilar y exigir su pronta liberación; además demandan un cese a las detenciones arbitrarias y las irregularidades en estos procesos, como es el caso de Mario González, detenido el 2 de octubre, quién realizó una huelga de hambre por 58 días, afectando gravemente su salud, en protesta por la forma con la que se le está juzgando.