foto, video: Equipo Indignación / foto de portada: Tribuna Campeche 

Candelaria, Campeche I Desinformémonos I  “Nacimos en Guatemala, somos profundamente guatemaltecos, de Laguna Larga donde hemos vivido 17 años y queremos regresar” denunciaron las más de 450 personas desplazadas ante la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) al campamento localizado en la línea divisoria entre el Petén y Campeche, en el municipio de Candelaria.

La visita «in loco» de la CIDH  se realizó el 1 de agosto al campamento de desplazados de la comunidad de Laguna Larga en el Petén, donde padecieron el desalojo forzoso por parte del ejército y la policía nacional de Guatemala. Las personas desplazadas, de las que son parte más de 200 niños, pidieron volver a su comunidad y el derecho a una vida como cualquier guatemalteco.

“Para nosotros es muy difícil lo que estamos pasando en este lugar tenemos ya dos meses abandonados por nuestro gobierno. No tenemos ningún recurso económico y la estamos pasando muy mal, en una situación terrible” denunciaron.

La destrucción del poblado recuerda los horrores de la política de tierra arrasada y los abusos del ejército contra los pueblos mayas en los tiempos de la guerra en Guatemala.

El 2 de agosto se cumplieron dos meses del desplazamiento sin que el gobierno guatemalteco haya respondido por un desalojo realizado con particular saña, en donde destruyó  y quemó  viviendas y propiedades de quienes llevaban 17 años viviendo en ese lugar, con plena violación a los derechos humanos de más de cien familias, 450 personas viviendo en condiciones infrahumanas.

La emergencia humanitaria en la que se encuentran no ha sido atendida a pesar de la gravedad de la misma, ya que ambos gobiernos, el de Guatemala y el de México, tienen la obligación de asistir dignamente a las familias desplazadas que viven en un campamento que ellos mismos realizaron con sus recursos en la franja fronteriza entre Guatemala y México, cerca del ejido El Desengaño.

“Este desalojo fue ilegal, no nos convocaron a una reunión. No fuimos convencidos. No nos avisaron que podíamos ocupar esa tierra. Nos dieron un golpe por la espalda. Nos traicionaron, el gobierno, la CONAP y el gobernador, que firmó este desalojo, pedimos que sea enjuiciado. Nuestra petición es retornar a nuestro lugar.  Este sitio no es el adecuado para nuestros hijos, carecemos de todo, de recursos económicos, de todo lo que necesitamos para criar a nuestros hijos” señaló Ana, mujer desplazada.

“Les pedimos con todo nuestro corazón que tomen conciencia y pongan el pecho al frente por nosotros. Hay más de 200 niños que están viviendo esta situación. Hemos pasado aguas, frío. El gobierno no nos ha traído alimentación. No han traído cosas que no son dignas para un ser humano. Han violado demasiado los derechos humanos y retorcido la ley. Los soldados llegan hasta aquí y no siguen atemorizando” añadió.

El relator de la CIDH para Guatemala, Luis Vargas, el Secretario Álvaro Botero, Joana Zylbersztajn, así como la representante de la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos para Guatemala, Liliana Valiña, llegaron  al campamento de desplazados a las 10:30 horas, donde por espacio de dos horas escucharon los testimonios de los habitantes de Laguna Larga y de otras comunidades que enfrentan amenazas de desplazamiento como El Reloj y La Mestiza.

Previamente recorrieron el poblado destruido de Laguna Larga.

Acompañaron la visita integrantes de La 72 Hogar Refugio para personas migrantes, el Equipo Indignación, Voces Mesoamericanas y Resistencia Civil de Candelaria quienes se suman a la exigencia de retorno, reparación y justicia para estas personas.

Con información del Equipo Indignación, A.C.