Israel hace uso excesivo de la fuerza a través de sus oficiales en manifestaciones o en respuesta a ataques, presuntos o reales, contra israelíes, así como restringe el acceso a ciertas zonas en Gaza y aplica la política de detención administrativa, con la cual faculta el arresto a sospechosos y los mantiene presos sin cargos, resaltó un informe del Comité Contra la Tortura de las Naciones Unidas.
Por su parte, Israel señaló que “rechaza categóricamente” la información del documento, y el vocero de la cancillería, Emmanuel Nahshon, insistió en que «Israel no emplea la fuerza innecesaria».
«Enfrentamos una ola de terrorismo sin precedentes y actuamos dentro de los límites del derecho israelí e internacional», justificó Nahshon.
Por lo menos 700 palestinos, incluidos 12 menores de edad, se encontraban bajo detención administrativa cuando se discutía el tema con las autoridades de Israel. Jens Modvig, copresidente del Comité, señaló que este tipo detenciones pueden prolongarse «durante meses, incluso años», casi sin acceso a los detenidos.
El gobierno de Israel respalda sus acciones al como una defensa necesaria a su sistema para prevenir ataques palestinos, quienes desde octubre del 2015 enfrentan el incremento de la ola de violencia en los territorios ocupados.
Con información de agencias
