Este 12 de febrero las calles se llenarán de manifestantes que coinciden en que las acciones contra México que el presidente estadounidense, Donald Trump, pretende aplicar, son discriminatorias, proteccionistas y una amenaza a los derechos de los mexicanos “de aquí y de allá”, de acuerdo con las convocatorias que circulan por las redes sociales.

Un grupo de 18 organizaciones convocaron a protestar en las plazas más importantes de las ciudades de Puebla, Nuevo León, Culiacán, Hermosillo y la Ciudad de México, a través del movimiento “Vibra México” para manifestar el rechazo al discurso y acciones xenófobas de Trump.

De la misma forma, el movimiento exigirá al presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, que evite la simulación y asuma acciones concretas e inmediatas para combatir la desigualdad, la pobreza, la corrupción y la impunidad.

El nombre de la movilización es “Marcha Ciudadana por el Respeto para México”, y convocó a los participantes a entonar el Himno Nacional en las ciudades del país a las dos de la tarde.

En la Ciudad de México la movilización partirá a las 12 horas del Auditorio Nacional hacia el Ángel de la Independencia. Los organizadores pidieron a los asistentes vestir de blanco.

Además de continuar con la insistencia de la construcción de un muro fronterizo, Trump amenazó con enviar tropas a México para detener a los “bad hombres”, “a menos que el ejército mexicano haga un mayor esfuerzo para controlarlos” dice un extracto de la transcripción de la conversación telefónica que sostuvieron Donald Trump y Enrique Peña Nieto el pasado 27 de enero y que obtuvo The Associated Press (AP).

“Tienen muchos bad hombres ahí”, le dijo Trump a Peña Nieto, de acuerdo con el extracto recibido por la AP. “No están haciendo lo necesario para detenerlos. Creo que su ejército está asustado. El nuestro no, así que podría enviarlo para que se haga cargo”, sostuvo.

Por otro lado, el presidente estadounidense confirmó que “el muro se está diseñando ahora mismo” y que su construcción comenzará “muy pronto”. “Estamos comprometidos a asegurar nuestras fronteras, a reducir el crimen, las drogas ilegales y el tráfico de personas”, señaló el magnate estadounidense.

De acuerdo con los cálculos del gobierno federal de Estados Unidos, el muro en la frontera sur tendrá un costo de, al menos, 16 mil millones de dólares.

Para ello, esta semana se formuló una propuesta en el Congreso Federal de Estados Unidos que plantea la imposición de un impuesto de 2 por ciento a las remesas que se envían a México desde el territorio estadounidense. Con ese impuesto a las remesas, el gobierno calcula que se recaudarán alrededor de mil millones de dólares por año para financiar el muro.