foto de portada: Víctor Galindo 

Ciudad de México I Desinformémonos.  La Caravana de Madres de Migrantes Desaparecidos 2016 «Buscamos vida en caminos de muerte» en memoria de Berta Cáceres en octavo día en México ha llegado ya a San Luis Potosí, después de haber pasado por Chiapas, Tabasco, Veracruz e Hidalgo.  La caravana que planeó recorrer once estados originalmente, para redoblar esfuerzos se desdobla y algunas madres se van al norte del país, acompañadas por el Movimiento Migrante Mesoamericano  y estableciendo nuevos enlaces con organizaciones civiles de Sonora y Tamaulipas.

Las muestras de la incredulidad

“Cada vez que escuchamos la palabra ‘Federal’ nos da alergia. Es que, lamentablemente, ya les perdimos toda la confianza. Pero qué podemos hacer. Yo ya no quiero que me pinchen, pero pues si ya me subí al burro, pues lo jinetello”, dice Ana Zelaya entre risa, incredulidad y hartazgo.

La División Científica de la Policía Federal les tomó muestras de sangre a su paso por Córdoba, Veracruz,  para extraer su ADN. Así también a otros 17, padres, madres y hermanos de migrantes centroamericanos que desaparecieron cruzando México. Forman parte de un grupo de 41 madres que buscan, aunque sea, una pista para encontrar a sus seres queridos.

Los familiares esperan que la policía use la muestra para hacer una base de datos y que la comparen con la información de otras bases obtenidas de trozos de huesos de personas muertas, contrastar los resultados. Así pues, esperan descartar que sus familiares estén muertos.

La incredulidad se entiende, la extracción no fue en un laboratorio, tampoco en una ambulancia, ni siquiera una unidad móvil. Fue en un cubículo de venta de bebidas y botanas de la Arena Córdoba, un estadio de voleibol para mil 500 personas construido para los Juegos Centroamericanos de 2014.

Ahí, los familiares de los migrantes esperan en un rinconcito de ese espacio amplísimo, como quien espera afuera del consultorio del doctor a ser llamado. El suelo está sucio, tiene manchas secas de comida y hay corcholatas en el suelo.

Representantes de la Fiscalía General del Estado de Veracruz, burócratas que este sábado les tocó trabajar, impiden el paso a los periodistas que quieren documentar el proceso. No vayan a contaminar las muestras. Ellos, a pocos metros de donde se hace el proceso, platican, hacen bromas y alguno que otro estornuda porque hace frío. No se vayan a contaminar las muestras.

De los 41 familiares que viajan en la XII Caravana de madres centroamericanas 2016, sólo 18 aceptaron que se les tomara una muestra genética. Algunos creen que no sirve de mucho que las pruebas las haga la Fiscalía, mientras que otros, que ya lo han hecho con otras instancias, prefieren no pasar la molestia de nuevo.

El discurso repetitivo de los políticos

A su paso por la ciudades y pueblos de México, la Caravana de Madres Migrantes Desaparecidos 2016 concita el apoyo de la gente. Una muestra de ello son Las Patronas, mujeres de inquebrantable voluntad que dan de comer cada día a los migrantes que pasan en el tren por su comunidad. Sin embargo, los gobiernos y sus funcionarios no reaccionan de la misma forma, sólo repiten un monótono discurso, escuchado muchas veces sin que se comprometan a nada.

Tomás Carrillo, delegado de Migración de Veracruz pide a las madres de la caravana “formalidad”  y canalizar correctamente sus peticiones, pero se “compromete” a dar soluciones e involucrar a los cónsules de los países de donde provienen

El secretario de gobierno de San Luis Potos, Alejandro Leal Tovías, habló de su voluntad de para dar solución a las peticiones. El cónsul salvadoreño Milton Atil Chinchilla Peraza, no estuvo lejos del mismo discurso repetitivo: “nos comprometemos”.  Pero los compromisos no se cumplen.

Por su parte, Marta Sánchez Soler, coordinadora de la Caravana Centroamericana de Madres de Migrantes Desaparecidos intervino y señaló claramente que la inversión que se realiza en políticas migratorias injustas, ilógicas e irreales, mejor que se destine a proyectos de desarrollo que se necesitan para que la gente que migra no vivan los peligros y condiciones que les toca vivir en la ruta que recorren por México. “La gente migra por necesidad, son desplazamientos forzados, huyen de la violencia y la miseria de sus países de origen”.

La Caravana de Madres Centroamericanas funciona, pero la realidad es que no se quiere tener a madres buscando a sus hijos e hijas desaparecidos, concluyó Marta Sánchez.

La Caravana se desdobla para extender la búsqueda a otros estados

En un comunicado emitido el 21 de noviembre,  la XII Caravana de Madres Centroamericanas “Buscando Vida en Caminos de Muerte”  anuncia que se desdobla sobre el territorio mexicano con el fin de cubrir más estados  y cumplir las expectativas de todas las mujeres y hombres que viajan este año buscando a sus familiares.

Por esta razón, un grupo de siete madres se desplazará a la frontera norte donde existen pistas de sus hijos desaparecidos.  Tres de ellas recorrerán parte del estado de Tamaulipas y las demás se trasladarán al estado de Sonora para realizar encuentros con organizaciones locales que las acompañarán en la búsqueda de las pistas de sus familiares.  La intención es encontrarse con organizaciones que trabajan en la frontera norte, con el fin de estrechar lazos de apoyo mutuo y realizar búsquedas más efectivas.

También una madre más se dirigirá al estado de Zacatecas para ingresar al Cereso Femenil Cieneguilla 3 en donde se encuentra recluida su hija desde hace cuatro años. Este será el tercer reencuentro de la caravana en este año. Las condiciones del mismo son dolorosas, por el hecho de que la joven hondureña esté encarcelada, pero habrá la oportunidad de que madre e hija se abracen y se espera haya la oportunidad de poder indagar las condiciones en las que se realizó la detención y los detalles del juicio.

Sin adelantar opiniones, los integrantes de la Caravana comentan “conocemos bien las circunstancias en que cientos de personas migrantes son encarceladas en México, muchas de ellas bajo delitos que no han cometido o en el marco de juicios que faltan de manera bochornosa al debido proceso, con condenas muy superiores a las que obtienen personas mexicanas por el mismo delito y sin el acompañamiento apropiado por parte de sus representantes consulares”.

Aunque el grupo y la ruta de la Caravana se bifurcan la unidad permanece, las madres y padres continuarán acompañados por el Movimiento Migrante Mesoamericano.