Ayer, Henriette Reker, se convirtió en la primera mujer en ser electa como la alcaldesa de la ciudad de Colonia, la cuarta más grande de Alemania.

La mujer de 58 años de edad recibió la noticia en el hospital, luego de que un día antes, un hombre la apuñalara en el cuello, en un ataque que se ha calificado de xenófobo.

Durante su campaña electoral, Reker –quien partía como favorita en los comicios al contar con el respaldo de conservadores, verdes y liberales–había apoyado abiertamente la política destinada a abrir las puertas de Alemania a un mayor número de solicitantes de asilo, y había prometido mejorar las condiciones de vida de los refugiados en Colonia, muchos de los cuales viven en tiendas de campaña.

La candidata independiente obtuvo más del 50 por ciento de los votos. De acuerdo con los reportes médicos, su vida está fuera de peligro, tras la operación que se le practicó.

Al agresor de Reker, un hombre de 44 años que fue puesto disposición de un juez de instrucción bajo los cargos de intento de asesinato y de lesiones graves, se le identifica como militante de grupos neonazis.