Aniversarios tristes como el cincuentenario del Autogobierno de Arquitectura concretado en la praxis al servicio de las necesidades del proletariado con internacionalismo libertario, con crítica teórica difundida con participación cubana para el entonces llamado Tercer Mundo y Países No Alineados. Hay frutos sin memoria concretada en los usos y costumbres del uso de materiales, estructuras y métodos de cálculo de constructores fuera o lejos de las universidades, pero el movimiento como tal no existe más.

Huesos en el desierto, tituló Sergio González Rodríguez a su denuncia del crimen organizado, con el Estado incluido por los influyentes empresarios del norte de México y las bandas criminales a su servicio. Víctima de secuestro, amenazas, golpiza, el escritor decidió asumirse como parte de las “muertas de Juárez” con todo lo que esto implica: menosprecio oficial, desprecio de los colegas vendidos, aprecio y ánimo de familiares sobrevivientes siempre insultados y hostigados.

Veinte años ha cumplido la narración dialéctica del testimonio, la investigación territorial, la aportación de crónicas y ensayos, para denunciar con precisión los feminicidios culminados en el libro con el asesinato de Marisela Escobedo, balaceada frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua donde se plantó para exigir castigo al asesino de su hija. Fue el Estado, el mismo que llevó al puente fronterizo a Miguel Bosé y a Plácido Domingo a cantarle a la multitud. Arturo Chávez pasó de delegado de la PGR a Procurador de Chihuahua, para después de salir acusado por su ineficiencia y su complicidad con el narcotráfico, ser nombrado Procurador General de la República por su presidente Felipe Calderón que aprobó su ascenso a General Brigadier. En el aniversario de su publicación es de celebrar la valiente resistencia de su autor.

Tribuna Comunista celebra su décimo aniversario con su número 500 al servicio de las luchas populares. Enhorabuena a Ruxi Mendieta, corresponsable de la edición y distribución.

20 años de la Ke-Huelga en campaña para construir una muralla contra los ataques a las radios comunitarias declaradas ilegales y peligrosas por interferir frecuencias, según denuncia de la morenista Comisión de Radio de la Cámara de Diputados. El siglo pasado hubo la excepcional presencia del diputado Virgilio Caballero, constructor de una red de radiodifusoras en lenguas indígenas en Oaxaca. Murió muy joven.

Ocho años de la noche de Iguala del 26 al 27 de septiembre, con revelaciones en contra de la “verdad histórica” del Procurador General de entonces, ahora procesado y en prisión preventiva. El reconocimiento del crimen de Estado significa una cadena de complicidades y responsabilidades coordinadas por Tomás Zerón, entonces Director de Investigaciones Criminales de la PGR, hoy exiliado en Israel gracias a la protección de sus cómplices. Revelaciones terribles sobre los infiltrados por el ejército y el gobierno de Guerrero, tienen que ver con Omar García, hoy diputado federal con su nombre verdadero. José Guadalupe Rodríguez Pérez al mando del Batallón 27 que protegió el crimen, fue ascendido a General al igual que sus operadores, el Teniente Barbosa ascendido y el Capitán Segundo Crespo ascendido a Brigadier. Gualberto Ramírez, entonces Fiscal de la Unidad Especializada en Investigaciones en Materia de Secuestro, goza de cabal salud y chamba segura, haciendo honor al apellido del conocido como El Huarachero, nombrado Presidente Municipal gracias a que financió la campaña del gobernador Ángel Aguirre, amplió su negocio gracias a la donación de un terreno donde construyó una plaza comercial para que él y su esposa de la familia Pineda, tuvieran cobertura para sus negocios de narcotráfico. Ambos siguen presos, no así la mayoría de los criminales involucrados.

Victoria Novelo Oppenheim organizó un seminario de crítica al Estado-nación en el CIESAS de Yucatán, como aportación positiva a la denuncia que ganó solidaridades en todo el mundo a los familiares de las víctimas de desaparición forzada de Ayotzinapa: “Fue el Estado” exige construir autonomías coordinadas desde abajo y a la izquierda. Las compañeras antropólogas de Yucatán han publicado el libro resultante con participación de sabios antropólogos como Andrés Fábregas y Antonio García de León. Póstumo homenaje a la muy querida y respetada Vicky que en su estancia en Mérida investigó y publicó las migraciones de Cuba a Yucatán y viceversa.

Otro gran impulsor de las ciencias sociales, Pablo González Casanova, cumplió cien años de vida sorteando gobiernos tan reaccionarios como el de Díaz Ordaz y el de Echeverría, para promover encuentros abiertos con investigadores activos tan famosos como Eric Fromm, Susan Sontag y Ernst Mandel. Los cursos de invierno y verano formaron a cientos de marxistas críticos alertados por las lecciones sobre Lukács de Flores Olea, la discusión de La democracia en México del querido Don Pablo, los trabajos colaterales de Sánchez Vázquez y De Gortari, y la incorporación académica del trotskista perseguido, encarcelado y refugiado en México, Adolfo Gilly con su exitosa obra escrita en la cárcel: La Revolución interrumpida, donde plantea “la Comuna de Morelos” como sobrevivencia revolucionaria para el futuro. La obra fue exitoso libro de texto de bachillerato “activo” de los CCHes fundados por Don Pablo. Gilly cambió los prólogos de las reediciones y las traducciones para ponerlos al día con el zapatismo en acción.

La incorporación de brasileños a la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM y al Colegio de México, significa el gran avance de las ciencias sociales gracias a Vania Bambirra, Theotonio Dos Santos, Ruy Mauro Marini, Fernando Cardoso que alcanzaría la presidencia de Brasil para negar todo lo enseñado en las aulas; los también sobrevivientes del golpe militar en Chile: Agustín Cueva ecuatoriano, René Zavaleta ex ministro boliviano.

El Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, significó una marcha ejemplar por la participación de organizaciones diversas en ciudades principales de todo México. En la capital, la Glorieta de las y los Desaparecidxs okupada con los retratos, recibió la instalación de una placa sobre “la Glorieta […] espacio de encuentro, esperanza y memoria contra la desaparición […] El ahuehuete que se encuentra en el centro, lo nombramos el Guardián de las y los desaparecidos […] mostraremos los nombres y los rostros de cada persona hasta que nos los regresen”. Con letras grandes: HASTA ENCONTRARLES. Las sillas destinadas a la jefa del Gobierno de la Ciudad, Claudia Sheinbaum, Andrés Manuel López Obrador y Alejandro Encinas quedaron vacías. Se ratificó la antigua glorieta de la palma como Sitio de la memoria, la verdad y la justicia por los desaparecidxs.

Frente a la Fiscalía General de la República, fueron instalados varios mosaicos con “Huellas por la memoria” con los nombres en una suela y en la otra un mensaje de lxs familiares. El miércoles 31 de agosto, la explanada de Ciudad Universitaria fue la sede de un Festival por la vida y por la paz por el aniversario de los caracoles zapatistas, con Leticia Servín y Argelia Guerrero, El Mastuerzo y León Chávez Teixeiro, entre otrxs, Ceiba y los gráficos que desplegaron una larga manta con una frase zapatista para luego colgarla con arduo esfuerzo en muro de piedra al costado de la Biblioteca Central de CU. Los caracoles, ejemplo de autonomías en resistencia contra el Estado represor que mantiene el acoso con paramilitares protegidos por las fuerzas armadas y los gobernantes de todos los niveles contra los municipios autónomos. La OCEZ que fundara Arturo Albores del Autogobierno de Arquitectura, encarcelado y asesinado después en su papelería de San Cristóbal de las Casas, es ahora el grupo armado que quema bodegas de café zapatistas y agrede a balazos a los cultivadores de las milpas alegando que invaden tierras que no les pertenecen. Los Acuerdos de San Andrés, invalidados por el Estado, no solo no se cumplen sino son contradichos por este Estado represor.