México. Ediciones Pentagrama está de fiesta. Cumple 33 años. Discos L.P. Casetes, videos y CD’s resguardan los casi ochocientos títulos que abarcan prácticamente todos los géneros musicales de México y América Latina pero, fiel a su nombre, Ediciones Pentagrama también ha editado libros y, de un tiempo a esta parte, documentales.

¿Quién le ha dado vida a quién? ¿Modesto López a Pentagrama o viceversa? Ambos. Mutuamente. La trayectoria de Pentagrama corre paralela a la de este argentino que llegó a México con los vientos del exilio, con su mirada clara, con su mente lúcida, con su sonrisa y sus ganas de seguir bregando los surcos de la utopía.

Tenía 17 años cuando empezó a estudiar teatro y armó su grupo. El medio cultural argentino lo fue llevando hacia poetas y músicos. Modesto dice que la vida lo fue guiando: “Las circunstancias me fueron subiendo a este tren, más que yo ir corriendo y treparme; fue algo natural”. Se le hace notar que hay semejanza con lo que decía el pintor impresionista francés Pierre Auguste Renoir quien se consideraba a sí mismo un corcho que era llevado por la corriente de la vida. Modesto, buen conversador, escucha con atención la anécdota y sonríe.

-Caminar por América Latina, viajar solo y luego en grupo, de alguna manera me va orientando, me va diciendo: Por acá va la cosa. Cuando yo hago esto (se refiere a Pentagrama) lo hago como cosa normal, como que así debe de ser. Cuando lo iniciamos teníamos muchas dificultades económicas. Fue mucho pulmón, mucho pulmón y mucho verbo, mucho hablar para convencer gente. Así se fue dando.

Iniciaba la década de los 80’s. Hace 33 años, hace una diferencia tan grande como la distancia de la Tierra al Sol. En Nicaragua se consolidaba la Revolución Sandinista, las luchas en Centroamérica buscaban la liberación de los pueblos y estaban llenas de esperanza en el futuro, la política exterior de México no daba vergüenza. Modesto López lo resume: “Son 33 años de diferencia, de monstruosos cambios, para mal”. Pero en aquel entonces dos amigos mexicanos le brindan el apoyo necesario para que se quede a vivir en México: “David Bask y Adolfo de la Huerta me ceden un espacio, me avalan, me cobijan, me dan crédito en su estudio de grabación. Yo creo Pentagrama en aquel momento en que las disqueras independientes que había no cubrían todas las necesidades. Había sellos muy importantes como Difusora del Folklor, de Los Folkloristas, que sigue siendo un sello muy bueno; el del Gordo (Julio) Solórzano,  Nueva Cultura Latinoamericana, y el sello de Pepe de Molina: Nueva Voz Latinoamericana. En fin yo entendía que había un espacio importante para trabajar en la música de América Latina y de México y decido crear Pentagrama que, de alguna manera, viene a incorporarse a ese movimiento que se daba en México y en toda América Latina en cuanto a la música, en cuanto a la canción.

“Cuando creamos Pentagrama nos planteamos que lo primero sería, es y será difundir aquella música que contribuya a enriquecer el pensamiento del hombre;  nunca priorizar lo económico por encima de lo ideológico; al mismo tiempo aceptar todos los géneros musicales; difundir aquellos que son la riqueza cultural de este continente y del mundo. También en el origen nos planteamos: 60% de música mexicana y un 40% de música de América Latina y del mundo. Hay tango, jazz, folklor latinoamericano, rock, afroantillano, también bolero en el catálogo de Pentagrama. Por eso nos abocamos mucho a recorrer el país, hacer grabaciones de campo. Damos una  importancia grande a la música para niños, entendiendo la música para niños fundamental en la educación del hombre. Un 10% del catálogo es música para niños de grupos de México y de América Latina. También abrimos una línea que se llama La Palabra que son los poetas en su propia voz, entre ellos podemos escuchar a Juan Bañuelos y a Juan Gelman.”

En la oficina de Modesto, justo atrás de él, el rostro de Emiliano Zapata nos mira fijamente y leemos sus palabras “Esos que no tengan miedo que pasen a firmar”. Fotografiados, los seres queridos acompañan a Modesto en la faena cotidiana: Marta de Cea, su compañera de vida, de andanzas, de utopías, sus hijas que también son sus cómplices, sus impulsoras al mismo tiempo que le siguen los pasos;  Mercedes Sosa, Oscar Chávez y muchos a los que se les aplica el “No doy nombre ni seña, sólo digo compañeros” que canta Daniel Viglietti. Con Modesto laboran con la camiseta puestísima de Pentagrama Erika Rivera y Héctor Santos, desde hace 14 y 17 años respectivamente. Recién se incorporó su hija Valentina, con todo su sonriente “quiero y puedo”, tan llena de proyectos como su padre y con la organizada calma de su madre.

En Modesto conviven la alegría y la reflexión. Este aniversario lo lleva a hacer balances: “Yo creo que estamos en la etapa casi final. Si el país va mal es imposible que un sello grabador como éste u otros similares se pueda mantener porque tiene que ver con la economía, con el estado de ánimo de la gente. En un país donde el ánimo es cada vez más depresivo, donde existen cada vez menos libertades, donde la economía no funciona, es muy difícil que podamos seguir. Parece que para las instituciones culturales y los gobernantes no es importante la cultura.

“Veo un panorama desolador. Aunque hay que seguir luchando, es agobiante. ¿A quién le interesa en estos momentos escuchar la música nuestra? Ni a los que promueven la cultura les interesa: su vida cultural es Televisa. No, no son los menos –ataja el comentario y argumenta: -yo creo que es la gran mayoría. Mira, han logrado una destrucción del país terrorífica, han formado un gusto distinto. El gusto y la cultura se trazan a través de las televisoras, Televisa y Televisión Azteca, los partidos políticos se orientan en base a eso.

“Lo digo en broma: para no seguir gastando plata, ya que intentan ahorrar tanto del presupuesto nacional, lo mejor sería que cerraran la Secretaría de Cultura, la Secretaría de Educación y que esas funciones las cumplan Televisa o Televisión Azteca. Con eso se ahorrarían funcionarios…. Esta gente que se dice izquierdista dentro de los partidos políticos, que de izquierda no tienen absolutamente nada, su gusto también ha sido manipulado. Toda esta runfla de políticos nos conduce, malconducen el país.

“Esta música que es la música que se produce en México de buena calidad, a nadie le interesa, ni siquiera en las fechas patrias; en fechas patrias lo único que existe es el mariachi, el mariachi más comercial”.

-La nueva tecnología es casi letal para una disquera independiente –se le pregunta casi afirmando.

-Vuelvo a lo que te decía: ¿Quién controla los medios de comunicación? La nueva tecnología, ¿qué difunde? La música que quiere difundir, la música que consume la mayoría. Mira, la nueva tecnología está formada por el gusto de los jóvenes. Nuestra música –que casi no está difundida- casi no se vende por internet. La venta es ridícula. ¿Por qué? Porque no hay una difusión. ¿Qué es lo que escuchan los jóvenes? No escuchan la música de los michoacanos o la Banda de la Princesa Donají ni trova yucateca. Entonces eso no les importa.

“Lo que le importa al sistema es lo que se vende y produce plata como si vendiera chorizo o un kilo de carne, da lo mismo mientras produzca ganancias. ¿Qué difunden los medios, la radio, la televisión? Eso es lo que se vende por Internet. No difunden nuestra música. Nuestra música queda reducida para cumplir con el sistema en algunas emisoras culturales y se acabó.

“Nosotros no existimos más que en un círculo de resistencia. Nosotros somos una resistencia. Yo creo que hay una política claramente establecida para aniquilar al pensamiento del hombre. En un país donde más del 50% vive en estado en baja pobreza, qué esperamos del resto. ¿Un 30% vive más o menos, come dos o tres veces al día? Y el otro 20% es el que goza este sistema.  Esa es la triste realidad y ellos son los que controlan los aparatos de poder. A esta elite a la que pertenecemos un grupo reducido que podemos comer tres veces al día y tener teléfonos celulares y computadora, nos controlan ellos. El gusto está formado para ellos. Y nosotros estamos ahí hechos un sándwich. No somos nada para ellos. Es una batalla. Nosotros somos la cultura de la resistencia. Y veremos hasta donde podemos resistir.”

Pero una vez que toca fondo, surge el otro Modesto, el que aunque agobiado sonríe y tira pa’ delante, el que no se da por vencido: “Me siento muy contento de haber participado durante 33 años en cosas que a mí me gustan. Vos imáginate: haber compartido parte de la vida, de los últimos años de Piporro, haber conocido a esa extraordinaria persona, haber producido sus últimos dos discos, habernos dado el gusto enorme de hacer los discos que él quería hacer, llevarlo a Veracruz; que él aceptara grabar con Pregoneros del Recuerdo, que aceptara grabar un tango con César Olguín, que compartimos tantas cosas en Monterrey con su familia, con sus amigos. El haber conocido gente como René Villanueva, un tipo impresionante, con un entusiasmo y un amor a la música y al hombre y a la lucha, que me llamara hermano y me considerara su amigo y me entregara primero que a nadie sus grabaciones de campo; o que después de la muerte de Rockdrigo en los sismos del 85, su amigo Gonzalo, que fue mi amigo del alma también, me entregara los papeles que había rescatado de en medio del derrumbe: “Modesto, estos son los papeles, quiero que te hagas un libro con los papeles de Rodrigo”; que el papá haya venido y dicho: “Este es el material y tú eres el responsable de que se saquen los discos de Rodrigo González”. El haberme encontrado con gente como la Banda de Tlayacapan, una banda histórica con la que trabajamos infinidad de proyectos. Con Oscar Chávez con quien hicimos casi 40 títulos, trabajos importantes como la Encerrona de toros con 52 canciones, las cosas que hicimos en Chiapas con los Zapatistas. Amparo Ochoa querida con quien viajamos por Ecuador, Nicaragua, Centroamérica y Argentina, con la que hemos pensado muchas cosas, con María Inés su hija… En fin, todo el recorrido con  La Banda de la princesa Donají en Juchitán, con los López (Mario y Gustavo), con Pastor Cervera que nos abrió las puertas de la trova yucateca, que nos posibilitó entrar a su mundo.

“Lo que me ha dado Pentagrama a mí es una historia a parte. Cada disco para mí no es un disco más. Cada disco tiene una relación histórica con mi vida, con mi alma, con mi forma de ver la vida. Es parte de mi existencia. Es un catálogo hecho de acuerdo a mis sentimientos, a la relación de afectos que hemos cultivado. Con Caito, con Delfor Sombra, con Nahuel, con Carmina Cannavino, con los músicos del norte de este país. Con Betsy Pecanins, con Margie Bermejo, en fin… Cuando hablo de Pentagrama hablo de 33 años de vida, de mi vida, de parte integral de lo que yo soy. La historia de Pentagrama la tengo acá, en el corazón, la tengo en el alma, la tengo en mi cuerpo. Es parte mía.

 “Yo hubiera querido hacer una gran fiesta en la memoria de todos los que están y los que no están pero fue imposible. Por eso yo me reduzco a que sea una muestra y venta de discos en el patio de Pentagrama.

“No obstante, el domingo 26 de octubre a partir de las 16:00 horas vamos a presentar tres discos en el Museo de Culturas Populares: el trabajo de Nayeli  Nesme sobre María Grever; luego Nostalgia Huasteca, un disco de música huasteca y después estará Tomás no Más, un compositor muy bueno al que le acabamos de sacar su disco.

“Los días miércoles, todos los miércoles de octubre, vamos a presentar un documental aquí en la sala de Pentagrama: “Ernesto Cardenal”, “Antonio Preciado”, “Alí Chumacero” y también el del Coro “Quiero Retruco”, integrado por ex presos políticos y familiares de desaparecidos en Argentina.

 Va a haber ofertas de discos, libros y videos aquí en el patio de Pentagrama, estamos en la calle de Coahuila #49, en la colonia Roma todos los días de once de la mañana a ocho de la noche hasta el 31 de octubre. Todos los días, domingos también. Vamos a hacer el festejo entre los amigos.