Buenos Aires, Argentina. El agronegocio internacional desde hace años está enlazando de manera importante la industria y el campo. En países como los de América Latina, sin el gran latifundio no existe la gran industria, porque igual que extrae la plusvalía de la fuerza de los trabajadores urbanos, el capital tiene que desplazar a las comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas en general, para implantar largos monocultivos de soya, eucalipto y caña, por ejemplo, para viabilizar industrias de papel, carne y alimentos en general.

Aquí presentamos la serie fotográfica realizada por Lala Iezzi:

En Argentina no es diferente, y es por eso que constituye una victoria para los movimientos sociales del país la realización del primer congreso nacional del Movimiento Nacional Campesino Indígena (MNCI), tras siete años de existencia formal. El MNCI incluye comunidades campesinas, indígenas y urbanas de diez provincias y tiene como principal desafío la lucha contra el agronegocio. No es casualidad que el encuentro ocurra ahora. En este momento, con los cada vez más altos precios de las commodities en el mercado internacional, el agronegocio tiene un gran poder.